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MACABRO SUCESO

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Digno de una película de horror llena de sangre y crueldad es la historia que a continuación leerá. La policía de California fue testigo de una escena difícil de digerir al encontrar el cuerpo de…

Le arranca el corazón a su amigo cuando éste aún estaba vivo!

 Digno de una película de horror llena de sangre y crueldad es la historia que a continuación leerá.

 La policía de California fue testigo de una escena difícil de digerir al encontrar el cuerpo de un luchador estadounidense a quien uno de sus compañeros de entrenamiento le arrancó el corazón cuando éste aún estaba vivo y todo porque según él, ‘creyó que estaba poseído por el diablo’…. este suceso si es de Enterarse y Sorprenderse!

  El abogado del presunto asesino, argumenta que su cliente actuó bajo un brote psicótico causado por la ingesta de setas alucinógenas.

 Cuando los agentes encontraron a Wyatt, de 26 años de edad, no podían creer de lo que sus ojos eran testigos, el asesino estaba de pie sobre el cuerpo desnudo de su amigo y con varias partes del mismo, incluidos un ojo, esparcidos por la ensangrentada habitación. También le arrancó la lengua y le rasgó la cara, era una espantosa escena de horror, hasta los propios policías se quedaron pasmados por tal macabro hecho.

 El agresor contó a la policía que lo único que había tomado aquel día era una taza de té con setas alucinógenas y que se había terminado convenciendo de que su amigo, Taylor Powell, estaba poseído.

 Según la autopsia el joven, de 21 años, murió desangrado después de que le arrancaran el corazón.  El forense asegura, además, que aún estaba vivo cuando le abrieron el pecho con un cuchillo y le sacaron el órgano.

 Wyatt, informó a la policía, que arrojó el corazón al fuego junto a otros órganos que le había quitado del cuerpo a su amigo. Según explicó lo hizo porque temía que Powell aún siguiera vivo con el demonio dentro, y en su locura el hombre quiso acabar con tal ser maligno.

 La policía fue avisada del terrorífico suceso por un tercer amigo que advirtió un cambio en el estado de ánimo de Wyatt después de que todos hubiesen ingerido el té de setas.

 Justin Davis contó a la policía que él regresó al departamento y encontró a Wyatt cubierto de sangre de pies a cabeza, vio un ojo en mitad del suelo y después descubrió el cuerpo mutilado de su amigo.

Wyatt se enfrenta a una acusación de asesinato en primer grado y tortura, con el agravante de que Powell aún estaba vivo cuando le arrancaron el corazón.

 

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