Beneficiario de Daca reúne a su madre con sus padres mexicanos que no veía desde hacía 30

Fuente: Univisión 34

“Al escuchar las historias de mi madre cuando era pequeña, sentí que estábamos cerrando muchas brechas que se construyeron a lo largo de los años”, cuenta Luis Cortés Romero de la reunificación que él mismo hizo posible.

“Mi mamá no sonríe mucho en las fotos, pero captamos esta en el momento perfecto”, dijo su hijo Luis.

Luego de varios intentos y viajes de más de cinco horas para ir al consulado estadounidense, los padres de Lourdes lograron obtener la visa para viajar a California y visitar a su hija.

Detrás de esta hazaña estaba su hijo Luis Cortés Romero, de 31 años, un beneficiario de DACA que tras obtener su grado como Abogado de la Universidad de Idaho decidió hacer realidad el sueño de su madre y permitirle abrazar a sus padres a quienes no veía desde hacía varías años.

“Sorprendí a mi madre al reunirla con sus padres después de 3 décadas sin que se vieran. Sus padres viven en México, y mi madre no puede visitarlos debido a su estado migratorio. Cuando fui a la facultad de derecho, prometí encontrar una manera de reunirlos y pude ayudarlos a obtener visas”, escribió Cortés Romero en su cuenta de Twitter, un mensaje que se hizo viral con más de 210 mil “me gusta”.

El proceso fue largo, de cerca dos años, y en varias ocasiones obtuvieron un no como respuesta. “Mis tías en México me estaban ayudando a obtener una visa de visitante, sin embargo les negaron varias veces la visa debido a políticas de discreción para negar por cualquier motivo”, dijo Cortés Romero a Univision 34 Los Ángeles.

Los abuelos Bella y Arturo, viven en un pequeño pueblo en el estado de Michoacán, México, a unas tres horas de distancia de Morelia. Sin embargo, el Consulado de EEUU más cercano estaba en Guadalajara, México, a unas cinco horas de distancia.

“Tuvimos que pasar por cuatro negaciones, y las visas se otorgaron en el quinto intento”, sin embargo, en los primeros intentos “no dieron una razón para la negación, así que seguimos intentado y pasaron varios meses antes de que otorgaran las visas para mis abuelos”, dijo Cortés Romero.

Además, la situación era mucho más complicada ya que Arturo, su abuelo, es sordomudo y analfabeto, “por lo que hizo las cosas más difíciles en el consulado”, explicó Cortés Romero.

Sin embargo, todo salió bien y tras ingresar a la casa por la puerta trasera, llamó a su madre Lourdes para recibir la sorpresa. “Mi madre no lo podía creer. Tras verlos abrazándose para mí fue muy emocionante saber que les había ayudado a reencontrarse”, expresó Cortés Romero.

Lo primero que hicieron fue hablar de comida y recordar los momentos de la niñez de Lourdes. “Al escuchar las historias de mi madre cuando era pequeña, sentí que estábamos cerrando muchas brechas que se construyeron a lo largo de los años”, cuenta Cortés Romero quien asegura que más adelante todos estaban en la cocina preparando la comida, un momento de familia indescriptible que muchas familias anhelan tener.

Su madre pudo celebrar el cumpleaños de su padre Arturo a quien no veía desde hacia tres décadas. Crédito: Luis Cortés Romero

Y las reacciones de miles de personas en sus redes sociales lo demuestran, “esta no es solo la historia de mi familia, he recibido cientos de mensajes de personas, jóvenes y adultos, que están en la misma situación”. Para Cortés Romero el haber vivido este emotivo momento en su familia le ratifica que en medio de los debates migratorios que existen en el país, la familia sigue siendo un elemento fundamental de la sociedad que “podría guiar el diálogo” sin importar corrientes políticas.