Tras varias semanas de análisis, mediciones y comparaciones de estadísticas térmicas, científicos de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), institución perteneciente a Naciones Unidas (ONU) revelaron que el 2013 fue el sexto año más caluroso para la Tierra desde 1850, pero que las altas temperaturas se igualaron a las del 2007.
Una vez acopiados todos los datos de múltiples fuentes mundiales, se dio a conocer la información acerca del comportamiento global y las temperaturas, el pasado mes de Enero del 2014, mes que casualmente ha resultado ser el 4to. más cálido en el Mundo desde 1880… aunque para muchos ello no haya sido una sorpresa, porque la tendencia hacia el aumento de temperaturas ha sido consistente.
Sin embargo, al parecer fue Enero del 2014 un mes sumamente errático en su comportamiento teniendo contrastes muy marcados e inclusive se observaron algunos récords de calor en partes de Groenlandia, Brasil, así como también en el centro y el sur de África, mientras que se registraron temperaturas más frías que el promedio histórico, en partes del norte y noreste de los EE.UU. y en el norte de Siberia.
De hecho, para todo el hemisferio sur del globo terráqueo, enero del 2014 ha sido el más cálido conocido desde 1880, ya como primer lugar absoluto. Los océanos situados en ese hemisferio han ocupado el 7mo. lugar en los registros históricos en cuanto a su elevada temperatura superficial del agua. Para el hemisferio norte, enero de 2014 ocupa el 10mo. lugar respecto a la menor caída de nieve en los últimos 48 años.
Esta es la conclusión general, que nos muestra que la tendencia al calentamiento global se mantiene intacta. Sin embargo, existen sus matices: si bien, como promedio el Mundo fue más cálido en enero de 2014, ello no quita que haya habido un crudo invierno en otras latitudes, aunque con predominio de calor excesivo y fenómenos meteorológicos severos, con el resultado de importantes daños económicos.
En California, se registraron condiciones de sequía extrema que generaron múltiples incendios forestales, cuyos daños aún están por calcular.
Por lo que definitivamente llegó el momento de tomar conciencia que, si no hacemos algo, pronto estaremos pagando las consecuencias de todos los daños que le hemos ocasionado a nuestra casa el Planeta.
¡Toma conciencia!
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