EL DIABLO Y DIOS NUNCA HAN HECHO LAS PACES

… y el aceite y el agua siguen sin mezclarse… a no ser que el agua esté muy aceitosa y el aceite muy aguado, es decir, que no sean puros, que hayan perdido sus propiedades.

Cuando uno ve países que fueron enemigos encarnizados, que se sangraron uno a otro en guerras destructoras y salvajes (todas las guerras son destructoras y salvajes) porque uno invadió al otro o el otro al uno, y luego de repente hacen las paces y empiezan a comportarse como si no se hubieran querido acabar uno a otro y como si no se hubieran bombardeado a lo bruto; como si no hubieran matado a miles o millones de civiles y soldados de uno y otro bando….. y ahora se tratan como si nada hubiera pasado y comercian y se relacionan normalmente… Uno tiene que preguntarse ¿Pos no que tan enemigos? Porque los enemigos verdaderos no hacen las paces hasta que no se vencen uno a otro. Hacer las paces es llegar a acuerdos, a arreglos.

Qué pensarán los sobrevivientes, padres, madres, hijos de los muertos en las guerras, cuando ven que los otrora enemigos posan juntos sonrientes para las fotos, sin importar que atrás se vean colinas llenas de cruces de víctimas de sus guerras.

Ya te estarás preguntando si lo que quiero yo es que las guerras no se acaben, no te equivoques, lo que yo quiero es que las guerras no empiecen… porque no han sido, no son y no serán la solución.

Se hacen las paces cuando las amistades se perdieron por un malentendido, por un error. Se pide perdón se pagan los daños y se vuelve a la paz, no a reforzarse y armarse más y mejor para la siguiente guerra, sino a corregir los errores que acaban con la paz.

Los únicos que no han hecho las paces son el diablo y Dios. El día que estos dos hagan las paces ese día nos llevó la fregada. Afortunadamente, la verdad y la mentira no llegan a acuerdos, no se comprometen. Podrá haber acuerdos entre mentirosos, y acuerdos entre amantes de la verdad, pero entre la Verdad y la mentira nunca los habrá… Y creemos y esperamos que al final la Verdad se impondrá sobre la mentira… y la humanidad podrá tener un final… o un futuro glorioso.

Mientras tanto vivimos tiempos turbios, porque como la Verdad pura incomoda a los amantes de la mentira, la atacan y la hacen aparecer como mentira… y a la mentira la hacen aparecer como verdad. Te dije al principio que el aceite y el agua no se mezclan… cuando son puros, pero cuando está sucios, desvirtuados, sí se mezclan. Habrás visto alguna vez lo que pasa cuando el agua del radiador se le mete al motor y con el aceite forma un lodo pestilente y asqueroso que termina por dañar tu carro…. Así están mezcladas la verdad y la mentira en nuestro mundo. Vivimos en un lodo de desinformación y engaño.

La tecnología tan fascinante, que se perfecciona cada día y que debería de servir para educar, instruir y formar los valores de las nuevas generaciones, más bien está siendo usada para adormecer, distraer, manejar a las masas.  En lugar de hacer personas más sabias y más libres…. encaminadas a la verdad, las  está volviendo más ignorantes y manejables.

Cada vez se busca más la aprobación por la apariencia que por la esencia. Estamos más satisfechos con que los demás aprueben y aplaudan la imagen que presentamos, que con la propia aprobación de lo que en verdad somos… La imagen cuenta para vender, la imagen cuenta para mantener el poder, la imagen cuenta para tener miles de seguidores que caen en nuestras redes… en las redes de una imagen. No sólo las personas aparentan, también las instituciones y los gobiernos. Se aparenta la justicia, el amor, la democracia.. Hasta la ciencia y la verdad se aparentan…

Sí, vivimos en un mundo turbio, pero lentamente la trenza empieza a desenredarse y la Verdad terminará por aparecer… y bien puede suceder que sea muy diferente a lo que por miles de año hemos tenido por verdad… Llegará el día que sepamos con certeza, lo que somos, de dónde vinimos y a dónde vamos… Entonces estaremos en paz. La Verdad vencerá la mentira. Dios vencerá al diablo, porque nunca han hecho ni harán las paces… Tengamos fe en la humanidad, apostemos a la Verdad….Saludos