Los recientes comentarios de Tucker Carlson, anfitrión de la cadena de televisión Fox New, sobre el reemplazo del voto euro-estadounidense por un electorado nacional compuesto por minorías étnicas no es nuevo. La base de esta creencia es tan vieja como el libro “Mi Lucha” de Adolfo Hitler.
Los grupos racistas, mismos que se diseminaros en suelo nacional después del ataque a las Torres Gemelas de New York en septiembre 11 de 2001, nutrieron este tipo teorías conspiratorias en el internet.
A esta información destructiva solo tenían acceso aquellas personas interesadas en este tema, muchos de ellos pertenecientes a grupos subversivos de extrema derecha, aunque también hubo personas –como yo y otros investigadores—, quienes tenían intereses académicos.
Tucker Carlson está creando un espacio real en los medios de comunicación (televisión) a los grupos racistas; está contribuyendo a la diseminación de teorías conspiratorias y negativas.
Inicialmente, de acuerdo a los creyentes de “gran reemplazo”, existe una especie de maquinación no solo por parte de los líderes políticos del país, sino también de la sociedad, de acabar con la población euro-estadounidense a través de la unión física de los diversos grupos étnico-nacionales.
El resultado de esta unión es la creación de una mezcla de etnicidades y la pérdida de la “pureza de las razas”, especialmente de “raza blanca”. El presidente Barack Obama y/o el ex gobernador de Florida Jeb Bush son ejemplos de este tipo de uniones, los cuales son altamente criticado por los grupos racistas.
Asimismo, los creyentes de esta teoría, popularizado por el escritor francés Renaud Camus a través de su libro Le Grand Remplacement (2012), son críticos al progreso alcanzado por las mujeres.
Debido a que las mujeres se dedican más al trabajo profesional y no profesional, dejan a un lado su papel tradicional de ama de casa. Las mujeres euro-estadounidenses especialmente prefieren trabajar y no procrear hijos.
Tucker Carlson oculta las verdaderas creencias de la teoría del “gran reemplazo”. No es solo el cambio del voto euro-estadounidense por el voto de las minorías étnicas, sino es una teoría racista.
Las bases de esta teoría, descansa en los principios de la medicina nazi y las creencias de la dominación blanca. Al difundir la teoría del “gran reemplazo, Tucker Carlson muestra el brillo de la esvástica alemana.
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