Susan Weese, decidió comenzar un viaje por toda Europa, pero al no tener con quien ir, para no sentirse sola se llevó un acompañante poco usual… Llevó con ella un esqueleto de plástico de tamaño real al que llamó Sam. EN SERIO!
La idea fue realizar una especie de proyecto fotográfico en el que recolectaría imágenes de Sam en distintos centros turísticos y haciendo todo tipo de actividades, desde visitas al Coliseo, hasta un viaje por Venecia.
Comenta que el viaje fue todo un éxito, ella no se sintió sola en ningún momento, ya que estaba acompañada de Sam, aunque tuvo que enfrentar algunos inconvenientes al explicar el porqué era acompañada por su peculiar amigo.
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