¡Hello, mis tesoros!, llegó el momento de saborear uno que otro chismecillo, así que empecemos ya!!
Es increíble que muchas mujeres prefieran antes al marido que a sus propios hijos, y lo digo por el caso de Noelia quien desde hace mucho grita a los cinco vientos que el marido de su madre Yolandita Mongue, Topy Mamery (ejecutivo de una importante cadena de radio) abusó sexualmente de ella. Y para que todos sepan que no miente se sometió a una prueba de polígrafo la cual confirmó todo, pero, según dicen las malas lenguas, no sólo la violó, también su propia madre y su padrastro la indujeron a consumir drogas, y la llevaron a discos swingers (donde hacen intercambio de parejas para tener sexo), y tal parece que aún era menor de edad; pero qué madre le tocó a Noelia, que la drogó y la abandonó, y se fue detrás de un hombre, ¡omg!
¿El amor o la conveniencia?… hicieron que una vez más Maripily regresara con Albert Rodríguez, pero lamentablemente esa decisión le costó unos cuantos golpes de su dizque amor, ya que, según dicen las malas lenguas, el hombre, aparte de engañarla con otro, le dio tremenda golpiza porque la mujer quería terminar con él, pero éste, por su orgullo herido, ¡zaz! que le pega. Lo bueno que la empresaria hizo un reporte policial en el que acusa a su ex pareja de haberla agredido físicamente, ¡bien por ella!
La colombiana no deja ni a luz ni a sombra a su joven marido Piqué, y no la culpo, si está ¡guapérrimo!, ¡verdad!
A Shaki ni siquiera su embarazo la detiene para ir a cuidar, digo, a apoyar a su futbolista, que, según dicen las malas lenguas, se está cansando que la cantante esté pegada a él como chicle (aunque esto a él le conviene) y aún más que le esté insistiendo en casarse, cosa que el hombre la piensa, ya que le gusta su independencia, pero la barranquillera no da su brazo a torcer, aunque tanta insistencia pueda dar pie a una posible separación para este año, ¡¿será?!
Mientras tanto Shakira se dedica a tener hijos, y más hijos, tal cual coneja, y asegura que le gustaría tener hasta 20 hijos, ¡ay, por Dios!
Se pelea con los paparazzis, lo arrestan por agresión y conducir de manera violenta, la policía ya no sabe qué hacer con este niño y para rematar, ni sus vecinos lo quieren, ya que, según dicen las malas lenguas, no dejan de llamar a la policía para quejarse del ruido, presuntamente que hace Justin con tantos parties que tiene, y aseguran que harán fiesta si es que algún día el chico se va del vecindario, ¡lol!
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