Salir avante de problemas no es sencillo, en especial si no se cuenta con ayuda. Por eso la “Doctora Consejos”, es una sección que espera ser una guía para quienes no encuentran la salida. El caso de hoy es:
Querida Doctora Consejos:
Yo tengo una amiga muy querida que conozco desde que llegué a vivir a este país, en 1995.
Ella me ayudó demasiado cuando yo no podía ni siquiera encontrar trabajo. La quiero mucho pero a pesar de todo eso, algo pasó que me hace sentir muy mal.
Ella ha estado en una relación muy complicada desde hace como 7 años que conoció a este señor. Ellos se pelean y se contentan.
Cada quien vive en su casa porque ella tiene hijos y él también, él vive con su esposa pero le ha dicho a mi amiga que es sólo por los hijos y sí le creo porque anda con mi amiga en la calle como si nada.
Pero en una de esas veces que se pelearon, yo me lo encontré en un night club, me puse a bailar con él y una cosa llevó a la otra y acabamos en un hotel.
Pasamos la noche juntos y desde entonces no lo he vuelto a ver, pero sé que ellos ya se contentaron.
Mi amiga no sabe lo que pasó y yo me siento muy mal con ella porque yo andaba tomada y él también. Esto que le cuento a usted no se lo he contado a nadie pero me está matando porque no puedo ver a mi amiga a la cara.
No espero que me dé ningún consejo porque esto pasó y no tiene remedio, pero necesitaba decírselo a alguien y por eso le mando esta carta.
— La Anónima
Querida Anónima:
No tengo nada qué decirte que no te hayas dicho tú misma. Es muy duro enfrentarse a uno mismo, sobre todo cuando se es consciente que se ha actuado mal.
Como me lo pides, no te daré ningún consejo, sólo espero que aprendas de esta lección y que no vuelvas a poner en peligro la amistad de esa persona que te tendió la mano cuando más lo necesitabas.
Buena suerte.
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