DOS ESTRATEGIAS “DE ORO” PARA LIMPIAR EL CEREBRO

¿Cuándo fue la última vez que se sintió de verdad feliz y pleno, con la mente clara, descansado y profundamente conectado consigo mismo, con la gente y con el mundo?

Si hace mucho tiempo de eso, es adicto al trabajo, tiene problemas para dormir o vive encadenado a sus dispositivos digitales, por lo que es probable que su cerebro necesite una “puesta a punto”, según los doctores David y Austin Perlmutte.

Davir Perlmutter es neurólogo, miembro del Colegio Estadounidense de Nutrición, y un reconocido investigador de las dolencias neurodegenerativas y divulgador científico en EEUU.

Austin es médico internista y sus intereses académicos se centran en estudiar los efectos del agotamiento, la depresión y el manejo de las enfermedades crónicas.

“La modernidad nos brinda infinitas oportunidades de satisfacer nuestros deseos, pero en un mundo saturado de pantallas, inmersos en una rutina que nos impide alimentarnos, descansar o ejercitarnos adecuadamente, nuestro cerebro libra una dura batalla”, explican. 

Ambos han creado un plan de diez días para desintoxicar, limpiar y fortalecer nuestro cerebro y reconectar con la corteza prefrontal.

Este programa práctico está descrito en un libro conjunto, “Limpia tu cerebro”, basado en los últimos hallazgos científicos.

DESINTOXICACIÓN DIGITAL.

Para conseguirlo, estos especialistas proponen poner en práctica las siguientes acciones:

1. Revisa y desactiva las notificaciones no esenciales (las ‘apps’ de uso ocasional y de correo electrónico, entre otras) del teléfono móvil y el ordenador.  Esto liberará tu mente y te permitirá concentrarte en tareas más relevantes.
2. Revisa y borra las aplicaciones innecesarias del teléfono.
3. Activa de forma predeterminada la función ‘no molestar’ del móvil y el ordenador.
4. Comienza a usar el ‘modo avión’ durante las comidas y las conversaciones importantes, y también mientras duermes.
5. Configura tus dispositivos para impedir que interfieran en tu sueño.  Activa la función de modo nocturno para reducir la exposición a la luz azul durante la noche.
6. Si las redes sociales no son esenciales para tu negocio y tu vida personal, plantéate abstenerte de usarlas o limita de forma sustancial el tiempo que les dedicas. 
7. Reserva períodos específicos de tiempo cada día para responder mensajes de texto, correos electrónicos y llamadas telefónicas, y cíñete a ellos. Respeta estos límites a toda costa.
8. Empieza a reducir el tiempo que pasas viendo la televisión. Es una oportunidad excelente para ponerte al día con libros, conversaciones e incluso con audiolibros y ‘podcasts.
9. Elimina cualquier compra por internet que no sea esencial.

TERAPIA EN LA NATURALEZA.

Los investigadores siguen intentando determinar cuánto tiempo necesitamos pasar en contacto con la naturaleza para obtener beneficios, señalan los doctores Perlmutter, pero mientras este punto se aclara proponen pasar, al menos, media hora al día en algún lugar que nos permita entrar en contacto con ella. 

En vez de intentar darse ‘baños de bosque’ o de preocuparse por alcanzar una meta específica, “solo intenta relacionarte de forma consciente con la naturaleza y registrar con todos los sentidos los sonidos, los paisajes y los aromas de las plantas que te rodean”, aconsejan.

“Puedes dar un paseo lento en el que dediques tiempo a apreciar la diversidad y la complejidad de la naturaleza, ya estés en la playa, en un parque o dando una vuelta por tu barrio. Encuentra un rincón de algún parque que te atraiga y dedica algo de tiempo extra a disfrutarlo”, proponen.

Hay muchas cosas que se pueden hacer en los espacios abiertos, como meditar en el parque, invitar a un amigo para charlar durante un picnic, llevar un libro, según los médicos. 

“La idea es estar presente en el momento y abrirse a los múltiples beneficios de estar cerca de la naturaleza, lo que implica silenciar el móvil, ponerlo en ‘modo avión’ o dejarlo en el auto, para prestar toda la atención a la belleza del mundo natural que nos rodea”, apuntan los autores de ‘Limpia tu cerebro’.

Por María Jesús Ribas // EFE/REPORTAJES