Mata a quemarropa a trabajadores por buscar tesoro en su propiedad

A pesar de la violencia que a diario vemos en los medios de comunicación, y de la que probablemente hemos sido testigos en nuestra propia comunidad, es inevitable no espantarse de las barbaridades…

 A pesar de la violencia que a diario vemos en los medios de comunicación, y de la que probablemente hemos sido testigos en nuestra propia comunidad, es inevitable no espantarse de las barbaridades que acontecen casi a diario el mundo. Como la historia de esta semana…

 El horrendo suceso ocurrió en el barrio de Manial Shiha, al suroeste de la capital egipcia, cuando un conductor de autobús mató indiscriminadamente, con un fusil automático, a seis de los veinte pasajeros que llevaba a bordo. 

 Y, Entérese y Sorpréndase, que la razón de tan despiadado acto fue porque los pasajeros fallecidos, junto al resto de los tripulantes, buscaban un tesoro arqueológico debajo de la casa del chófer, motivo que hizo enfurecer a éste y hacerlo actuar de tan despiadada forma.  

La causa de la matanza

 Según investigaciones preliminares, todo se derivo de las discrepancias entre el conductor y uno de los trabajadores de Arab Contractors, identificado como Abdelfatah Tebtili Salem, sobre un tesoro arqueológico.

 Según testigos, Salem y otros empleados de la constructora, todos ellos vecinos del distrito cairota de Heluán, buscaban un tesoro arqueológico supuestamente enterrado en la vivienda del conductor, situada en esa misma zona del sureste de la capital egipcia.

 Al chófer del camión, perteneciente a la misma compañía de los hoy occisos; no le gustó la idea de que husmearan en su propiedad, por eso, cuando subieron para llevarlos al trabajo, les expresó su desacuerdo, pero los buscadores se mofaron de él.

   En ese momento el chofer no dijo nada, pero pensó en vengarse de Salem, quien más se burló de él;  ocultó un rifle en el autobús y cuando en la tarde lo vio llegar, le disparó a quemarropa y mató en el acto, según informes policiales.

 Al ver la escena del cuerpo inerte de Salem ensangrentado, al conductor le dio un ataque nervioso y comenzó a disparar a diestra y siniestra contra el resto de pasajeros del autobús.

  Además de los seis muertos, en el incidente resultaron heridos varios de los ocupantes del autobús.

 Las víctimas trabajaban para la empresa constructora egipcia “Muqauilin al Arab” (también conocida por su nombre en inglés de Arab Contractors), que en un comunicado identificó al conductor con el nombre de Mahmud Taha Ahmad.