LOADING

Type to search

Visualiza lo que deseas

Share
Comparte

Es una de las más potentes herramientas con las que contamos, ‘aun cuando no creamos totalmente’, en la visualización

  Si tomamos como base que “Todo es Mente”, es decir, que todo es mental, tanto lo bueno como lo malo, todo es, porque en algún momento existió en la mente de alguien.
   Para empezar, habría que definir lo que es la visualización, puesto que existe un tanto de confusión al respecto. Mucha gente piensa que se trata simplemente de soñar despierto, dejar volar libremente la imaginación sin ningún método ni propósito concreto.

   La visualización requiere un esfuerzo, un propósito, una meta y una dirección; hay una serie de pasos muy sencillos, pero importantes para llevar a cabo en una visualización.

  El primer paso para visualizar es ‘SABER’ qué queremos con exactitud, con datos, pelos y señales. Y, por supuesto, una vez que nos hayamos decidido, atenernos a ese deseo concreto y no cambiarlo por nada.

   El segundo paso es la visualización en sí; vamos a llenar de vida ese deseo. Esto es, esa imagen que tú has planificado clara y nítida, perfectamente detallada, la vamos a llevar a la mente. Los ojos cerrados y un estado de relajación mental y física son imprescindibles. Una vez relajados cuerpo y mente, vamos a reproducir esa imagen mentalmente de forma real. 

  ¿Qué hacer para conseguir que sea más real?:  Es muy simple, se trata de que no te limites sólo a ver en tu mente, sino que lo sientas real. En la visualización tienes que sentir, la emoción impulsada por el resultado. No hay un tiempo concreto para trabajar con la visualización, pero es importante tener en cuenta una cosa: valen más cinco minutos de una visualización bien hecha, que una hora de pensamientos que divagan sin sentido.

   Después llega lo que para muchos resulta un poco difícil: DESCONECTAR. Sí, parece fácil, pero no lo es, cortar con la visualización y volver a la actividad cotidiana sin que tu mente vuelva al objeto de la visualización con frecuencia. Tú ya has hecho tu parte, deja que el Universo se encargue del resto, a ti sólo corresponde propiciar que se cree el escenario adecuado para que eso se produzca. Esto nos lleva a uno de los puntos claves para que haya resultados: ¡FE!. Si no creemos a cada segundo en lo que estamos haciendo, si dudamos del éxito de lo que hemos solicitado, si en el fondo no estamos convencidos de que lo merecemos, entonces la visualización se transforma en una absurda pérdida de tiempo.

  Por supuesto que hay que afirmar que todo será de forma positiva, para conseguir cosas buenas en nuestras vidas no tenemos que perjudicar a otra persona.

   El Universo está lleno de abundancia, hay de todo para todos. No te empeñes en que quieres el coche que tiene tu vecino, si tanto te gusta, pide uno igual, pero no el de tu vecino. Del mismo modo que si te parece maravilloso el marido de tu amiga, pide que entre alguien en tu vida que tenga una personalidad similar, pero no pidas concretamente al marido de tu amiga.

   No olvidemos que la Ley de Causa y Efecto opera en todo momento. ¡Tus pensamientos siempre tienen que ser positivos para lograr tus metas!

Comparte

Next Up

WordPress Appliance - Powered by TurnKey Linux