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Maureen Hagar de 73 años, que pesaba 355 libras cuando comenzó el régimen en 2022, ha bajado a 190 libras y tiene el objetivo de perder más.
“Estoy muy orgullosa”, dijo Hagar a Business Insider. “Ha sido necesario mucha resistencia y compromiso”.
Hagar recurrió a la comida para lidiar con su estrés
Después de casarse y tener a su hijo hace 34 años, le resultó cada vez más difícil no comer en exceso.
“Esperaba hasta que mi marido se durmiera y volvía a la estufa o al refrigerador”, dijo.
Hagar desarrolló un patrón de alimentación reconfortante. A su hijo le diagnosticaron con necesidades especiales y ella recurrió a la comida como medio para afrontar el estrés. “Reprimí mis emociones”, dijo.
Se volvió diabética a principios de la década de 2000. Los médicos advirtieron sobre los riesgos para la salud y ella siguió varias dietas y programas de ejercicio; una vez perdió 70 libras, que recuperó durante la pandemia.
La familia invirtió en un scooter de movilidad para que Hagar pudiera acompañarlos en caminatas y paseos marítimos en California.
Luego, en 2023, la mentalidad de Hagar finalmente cambió. Pesaba 355 libras (su altura de 5 pies y 4 pulgadas). Un familiar la animó a inscribirse en un gimnasio Life Time, donde comenzó a hacer aeróbic acuático de bajo impacto, incluida marcha en la piscina olímpica.
Pasó de completar apenas un puñado de vueltas a 25 y luego a 50, animada por su entrenador personal, Derek Conway, a quien contrató en julio de 2023.
Conway también trabajó con Hagar, que tiene artritis, en el piso del gimnasio, haciendo ejercicios cardiovasculares suaves en una máquina elíptica sentada y en una bicicleta estática. Hicieron ejercicios de fuerza y acondicionamiento y ahora entrenan con equipo de boxeo.
El entrenador dijo que la clave del programa de acondicionamiento físico de Hagar era hacer el mayor movimiento posible durante el mayor tiempo posible. Va al gimnasio por las mañanas cinco días a la semana y se queda tres horas.
El hombre de 34 años ayudó a diseñar un plan de nutrición para Hagar. Se basa en la dieta denominada “slow carb”, que incluye alimentos ricos en proteínas como huevos, pescado y pollo y verduras, especialmente legumbres, como lentejas y judías.
“Eliminamos todo el pan, los alimentos procesados y los azúcares simples”, dijo Conway. Hagar dijo que la dieta era responsable de limitar su respuesta glucémica. Ella revirtió su diabetes y dejó de tomar medicamentos. Se sorprendió al perder hasta 10 libras en una semana. El scooter y el andador de Hagar fueron enviados al garaje. Arrojó uno de sus bastones y empezó a caminar sin el otro.
Por: Jane Ridley
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