¿Qué pasoó razaaa, cómo la han pasado con este sabroso calorcito que empieza, bien?.. Pos ojalá que no se les calienten mucho las tepalcuanas… Y pa’ empezar les voy a echar el de rigor, el chistorete de hoy se llama “La Cerca”, espero que les guste… ahí les va.
Resulta que una pareja celebraba su 50 aniversario de boda, y para “recordar viejos tiempos” decidieron volver al pequeño pueblo donde se habían conocido.
Sentado junto a ellos, en estaba un policía local que sonreía mientras ellos hablaban.
•-• ¿Recuerdas, mi cielo (ya ni se acordaba el nombre de la ruquita) la primera vez que hicimos el amor?, sobre ese prado que está al otro lado de la carretera cuando te puse contra la reja.
-_- Aayyy, Nicasio, qué cosas dices!
•-• Oye,,, ¿y por qué no lo hacemos otra vez por los viejos tiempos?
Salieron del café y cruzaron hasta el prado.
El policía se sonrió, pensando cuán románticos eran, y aunque se haría de la vista gorda, no estaría de más echarle un vistazo a la pareja, por si acaso se hacían daño.
El viejecito llevó a su mujer al lugar, le subió la falda, él se bajó los pantalones y cuando estuvieron “listos” la apoyó contra la reja.
El policía que seguía mirando, no podía creer lo que veía!!!
Con la vitalidad de una jovencita, la mujer se movía violentamente de arriba abajo, mientras el marido se convulsionaba como un salvaje.
Pero pronto los dos cayeron al suelo, respirando entrecortadamente, exhaustos.
El admirado policía se acercó y sonriente dijo:
– Güuau, ha sido la forma más bonita de hacer el amor, que he visto..! Ustedes debieron ser una pareja muy salvaje cuando eran jóvenes.
•-• No… realmente no, dijo el viejecito, cuando nosotros éramos jóvenes, esta reja de mier…a no era eléctrica!!!
ja!, ja!, ja!, ta’ güeno, ¿a poco no???
Y cambiando de tema… Déjenme les cuento lo que me pasó hace unos días uno de mis viejos amigos me invitó a ver una pelea, quezque estaría muy buena. Me dijo que también iría fulano, zutano y perengano, ah!, y me aclaró: “Pero te traes una lana, porque después de la pelea nos seguimos con una dominada“ (o sea, jugar dominó). El mero día, andaba yo medio cansadón, así que se me hizo fácil y compré pa’llevar unos toritos rojos (red bull, pues)… Acabada la pelea, nos dispusimos a empezar la jugada, entonces jui al carro por las bebidas y les ofrecí,,, justo en ese momento entra la señora de mi cuate, lo ve con la lata en la mano y como loca que le grita: “¿Qué no entiendes que te hace daño esa porquería..? Eso te va a fregar los riñones, el higado y el corazón!”
Mi cuate, queriendo quedar bien con nosotros, le contestó que estaba loca, que se calmara… uuuy, nunca lo hubiera dicho, porque ahí empezó la pelea,,, bueno esa otra pelea.
Yo francamente me sentía muy mal, por la situación que sin querer había provocado, por eso a los pocos minutos, hice una señal a los otros paracaidistas, y calladitos como perro en freewey, con la cola entre las patas, nos fuimos…
Pero fíjensenn que este incidente me puso a pensar en todo lo que “nos hace daño”… Porque se han dado cuenta que ya casi no pude comer uno nada porque TOOOODO nos dicen “aaguas!, eso te hace daño”, te hace mal… vean estos ejemplos:
Si comes carne roja, uuuy!, tendrás problemas de obesidad, propenso a enfermedades de cáncer, migrañas, gota, artritis y quién sabe cuánta cosa más, dicen… aaah!, pero si no la comes, no hay manera de suplir las proteínas y los aminoácidos que contiene y entonces tendrás problemas con músculos, tendones, piel, uñas, bajas defensas, etc., y los chamacos crecerán enquencles, desnutridos y poca actividad física.
Aaaguas con los huevos, -de gallina, claro-, porque tienen mucho colesterol, y se tapan las arterias y esto y lo otro,,, aaah!, pero por cientos de años, el huevo ha sido uno de los alimentos más completos que ha consumido la humanidad, y ésta no se ha acabado, ¿entonces?.
Que aaaguas, con la sal, porque se te sube la presión… Que aaaguas con el azúcar que es muy mala pa la diabetes y te engorda… Que aaaguas con esto y con aquello porque te hace mal. En fin, la cosa es que, gracias a tanto __iinche estudio y tantas declaraciones que hacen dizque “expertos”, todo, prácticamente todo lo que comamos nos va a hacer daño, bueno, hasta comer puras mendigas verduras, nos puede generar lombrices si no se lavan bien… ¿entonces qué __ingaos vamos a tragar?
Yo creo que sí podemos y hasta debemos comer de todo, beber de todo y hacer de todo, aaah, pero eso sí, sin exagerar (ni en el sexo), porque acuérdensennn que todo en esta vida, no por el uso, sino por el abuso es lo que a la larga -o a la corta- nos jooo,,,roba la existencia; güeno yo….
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