Ante el intenso frío de invierno, los seres humanos suelen recurrir a ciertas medidas para protegerse del inclemente clima: abrigos, calentones, cobertores, son sólo algunas de ellas.
¿Cómo logran sobrevivir a fríos tan intensos?
Ante el intenso frío de invierno, los seres humanos suelen recurrir a ciertas medidas para protegerse del inclemente clima: abrigos, calentones, cobertores, son sólo algunas de ellas. Pero, los animales, sobretodo los que viven en zonas extremadamente frías todo el año, no gozan de estas ventajas del mundo moderno. Pero no les es necesario, pues la mayoría de ellos, cuentan físicamente con lo necesario para sobrevivir al frío polar.
FORMAS DE SOBREVIVENCIA Las regiones polares son los lugares más fríos de la Tierra. La nieve y el hielo cubren el mar y la tierra firme durante la mayor parte del año, o siempre. Los veranos son cortos y frescos, con muchas horas de luz, y los inviernos son largos, oscuros y gélidos. Ante el despiadado clima del Artico, los animales que viven en él se protegen así..:
Animales como el lobo y el zorro ártico tienen una gruesa capa de grasa corporal y un espeso pelaje que reducen la pérdida de calor del cuerpo.
Otro mamífero, que también posee un espeso pelaje que lo proteje del frío polar, es el buey almizclero. Es un bóvido y su pelaje está hecho de dos tipos de pelo: la capa exterior enmarañada tiene pelos de 1 m de longitud, y la inferior, lanosa, corta y tupida, es un cálido abrigo.
Las focas y las morsas son otros mamíferos que gracias a su gruesa capa de grasa que tienen por debajo de la piel, pueden sobrevivir a las bajas temperaturas del Artico. Las ballenas y los osos polares también la tienen; en el caso de la ballena, la capa de grasa puede tener un grosor de hasta 50 cm.
Pero no sólo la piel de éstos y otros mamíferos es la defensa principal ante el frío polar, las liebres árticas por ejemplo, logran sobrevivir a este clima gracias a sus orejas. En efecto, aunque son cortas, desprenden menos calor interno.
¿Por qué no se les congelan los pies?
Los pies de los animales son una de las partes más frías de su cuerpo, sobre todo cuando, como en los polos, están en contacto con el hielo. Los mamíferos, como los osos polares y los zorros árticos, tienen pelo entre los dedos para evitar que las patas se les congelen. Algunas aves polares, como la perdiz nival, tienen plumas en las patas por el mismo motivo.
Y hablando de aves… ¿Cómo se mantienen éstas calientes en los polos?
Las aves que viven todo el año en el Artico y en la Antártida tienen un denso plumaje. Las plumas externas impermeables las resguardan del frío y el agua. Por debajo, un denso pulmón les ayuda a conservar el calor corporal.
¿Se camuflajean los animales polares?
Animales de todo el mundo tienen colores y dibujos corporales que los confunden con el entorno. Ese disfraz natural, o camuflaje, los ayuda a ocultarse de sus enemigos o depredadores. En el Artico y en la Antártida, muchos animales son blancos, lo que los mimetiza con la nieve invernal.
Los hay que cambian de coloración en verano, para seguir ocultándose cuando la nieve se funde. Tal es el caso de el armiño, un tipo de comadreja cuyo pelaje cambia a un color marrón durante el verano, que lo mimetiza con el paisaje rocoso. En otoño muda el pelaje estival para
cambiarlo por un abrigo blanco impoluto.
El plumaje de la perdiz nival es blanco en invierno, y en verano se vuelve pardo y moteado para hacerla pasar desapercibida entre el suelo y las rocas.
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