El cocodrilo es uno de los reptiles más grandes en el mundo y es también de los más feroces. Pertenece a la misma familia de los caimanes, gaviales y yacarés, aunque hay diferencias entre ellos.
El cocodrilo es uno de los reptiles más grandes en el mundo y es también de los más feroces. Pertenece a la misma familia de los caimanes, gaviales y yacarés, aunque hay diferencias entre ellos.
El llamado cocodrilo tiene un tamaño mayor que los otros; su cuerpo, de color verde grisáceo, es alargado y su piel está provista de fuertes escamas, resistentes incluso a las balas. Tiene las patas cortas, las de adelante con cinco dedos y las de atrás con cuatro, unidos por membranas.
Su cabeza es larga y estrecha con un hocico puntiagudo.
Posee una cola fortísima con la que derriba sus presas. Son muy fuertes y pueden descuartizar una presa en el agua.
Estos animales feroces habitan en los países tropicales de todo el mundo. Viven sobre todo en los sitios donde hay grandes extensiones de agua con poca profundidad, ya sean las costas del mar, las orillas de los ríos o las regiones pantanosas. Todos son acuáticos.
Cuando se sumergen sólo les sobresalen del agua los ojos y las aletas de la nariz, forma en la que pueden vigilar sin ser vistos. Hay 25 especies de crocodiliados, de los que más o menos la mitad son los que se llaman verdaderos cocodrilos.
Entre éstos está el del Nilo, la especie más conocida y la que es más temible para el hombre, a la que sigue el cocodrilo de agua salada, llamado Poroso, que vive en las costas meridionales de la India y Malasia, algunos de cuyos ejemplares llegan a tener 6 m., de longitud. Otras especies habitan en América Central y las Antillas.
La alimentación es variada, comen peces, tortugas, aves marinas, mamíferos y hasta hombres.
Se reproducen por medio de huevos como los otros reptiles. La hembra pone de 30 a 60 huevos que unas veces entierra en la arena y son incubados por los rayos solares; otras, por la hembra alternando con el macho.
En ocasiones esconde los nidos entre ramas, siendo incubados los huevos por la madre, que permanece allí hasta que oye gruñir a las crías y salen del nido.
A pesar de que el cocodrilo es un animal muy grande, el huevo que pone es tan pequeño como uno de ganso, debido a que el cocodrilo al nacer no tiene más que 20 cm de longitud. Por otro lado, su longevidad es tanta, que algunos llegan a vivir hasta 100 años.
Su piel es muy apreciada para la fabricación de innumerables objetos.
La grasa tiene varias aplicaciones comerciales, y en algunos países se comen sus huevos. El cocodrilo, además de peligroso, es astuto y sagaz, pues sabe esconderse para atacar a su presa.
Es por eso muy curiosa la relación amistosa que tiene este animal, con el ave marina llamada arenario, la cual se introduce tranquilamente en su boca para sacarle los parásitos y los restos de carne que hayan quedado entre sus dientes, mientras el cocodrilo, tumbado al sol, mantiene sus mandíbulas abiertas, muy complacido por las cosquillas que le hace el ave, quien, una vez terminada la limpieza, sin mayor riesgo sale muy campante de la boca de tan peligroso animal
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