El sueño del esposo fallecido

  Todos hemos tenido sueños que nos intrigan por su rareza o frecuencia. Esta sección está conceptuada para dar respuesta a esos sueños inquietantes. Hoy tenemos…: 

Sueño

Hola Amigo Bernabé: Me siento muy triste. Mi esposo murió hace pocos meses. Dos meses antes de su muerte ya nos habíamos separado. Tuvimos un hijo que a los 6 años murió por muerte natural (estaba enfermo del corazón).

   Él se fue con otra mujer y  cuando murió, su familia no me dejó velarlo y me quedé muy dolida, intranquila y decepcionada. Aún lo quiero y le lloro, vivimos juntos casi 8 años y yo lo cuidaba aunque yo también cometí errores. 

   El motivo de mi carta es porque hace días lo soñé en la caja y estaba boca arriba. Miré sus manos y hasta con el corte de cabello que usaba, lo estaba viendo y de repente estaba de lado yo trataba de abrir el vidrio que cubría la caja y le decía “respira amor”, sentía cómo salía el frío de su cuerpo y le sangraba la nariz. En eso un sacerdote me dijo que yo no podía estar ahí. Después en el sueño me perseguía un hombre y yo me escondía de él. Cuando desperté me recuerdo que no era mi esposo el que me perseguía. Era otro hombre. Por favor ayúdeme, quisiera hablar con él. Espero su pronta respuesta.

      Bendiciones.         — Violeta

Interpretación:

  Amiga Violeta: Te mando un fuerte abrazo y lamento todas tus pérdidas. Soñar con un ataúd advierte que el soñante sufre un periodo de depresión. Soñar que dentro del ataúd está un ser querido que recientemente falleció significa que la mente inconsciente está todavía tratando de asimilar la pérdida.

 También puede significar que la mente del soñante todavía no acepta la realidad de que ese ser humano de verdad se ha ido para siempre. El sueño de persecución podría estar conectado con el hecho de que su familia no te dejó despedirte de él.

  El sacerdote que te habla podría significar que hay una autoridad con cierto derecho a oponerse a que te acerques al difunto. Mejor dicho, si quieres hablar con el difunto, puedes hacerlo así: escribe una carta con lo que quieras decirle y la llevas hasta tu mesa de noche.  Al momento de irte a dormir, después de decir tus oraciones, lee la carta y con esos pensamientos quédate dormida. Repite este ejercicio por varios días. Si tu esposo no desea comunicarse contigo, el ejercicio no dará resultados. Pero si sí lo desea, es posible que venga a buscarte en alguno de tus sueños.    Tu amigo, Bernabé