ETIQUETAS

Por experiencia debes de saber que las etiquetas no siempre corresponden al producto que las lleva pegadas; pocas veces cumplen lo que prometen. Ni el jabón “superdesmanchador” le borra el sello a tus calzones, ni el champú de leche de las siete burras impide que la frente se te vaya hasta la nuca, ni las tortillas de maíz pinto saben a gloria… o quién sabe, porque pocos podemos decir que hayamos probado a Gloria.

Las etiquetas de la mercadería fallan a menudo…. y a pozole y a huevo; sea porque presumen cosas fabulosas que el producto no lleva y no hace, o callan otras espantosas que sí lleva y sí hace. Pero si fallan las etiquetas que les colocamos a los productos, todavía fallan más las etiquetas que les colgamos a las personas y hasta las que nos colgamos nosotros mismos, porque para presentarnos nos colgamos alguna etiqueta…. “Soy fulano de tal, soy mexicano…hondureño, boliviano, guatemalteco, peruano….” y aunque te cuelgues la etiqueta de “ingeniero”, no faltará quien te cuelgue la etiqueta de “mojado”, otro te colgará la de “creído”, y más de alguno te colgará la de “pobre”. En dos por tres etiquetamos a la gente, y según las etiquetas los catalogamos; con la peculiaridad de que, casi siempre, les ponemos etiquetas negativas…No hay de otras, puras etiquetas negativas traemos listas y a la mano para colgarle al que encontramos: este es un pendejo, otro pendejo, un tarugo, un  baboso, un güey…

Sabemos bien que el que nos encuentre nos colgará etiquetas, por eso antes de encontrarlo nos colgamos nosotros las nuestras y a veces hasta nos quitamos algunas que traíamos colgadas, según sea el caso. Aunque la misma etiqueta puede significar cosas muy diferentes; Por ejemplo: si alguien con orgullo se coloca la etiqueta de mexicano, está queriendo decir que tiene todas las cualidades y virtudes que tiene una persona nacida en México. Pero puede venir alguien y colocarle a la misma persona la etiqueta de “mexicano”, queriendo decir que tiene todos los defectos que puede tener una persona nacida en México, porque ya etiquetamos las virtudes para cada país y raza del mundo. Como quien dice, todos, pero todos, hacemos un juicio previo, pre-juicio, de las personas. “Si es argentino es así y así y asa, porque así son los argentinos”  “Si es mexicana es así, así y asa, porque así son todas las mexicanas”…prejuicios, juicios previos… No sólo juzgamos  a las personas, también a los países y razas completas. “Si es europeo es colonizador, si es oriental está despertando; del Medio Oriente está medio orientado; si es occidental se le está metiendo el sol…” juicios previos, prejuicios para poner etiquetas a todos y a todo. Incluso nosotros mismos nos etiquetamos, porque nadie quiere andar por el mundo con la etiqueta de persona, simplemente persona, ser humano. Nomás por curiosidad, intenta un día verte y ver en los demás solamente la etiqueta de “ser humano”. Verás que te sentirás más ligero y puede ser que descubras un ser humano interesante y digno en todos y cada uno de los demás.

Se empieza por ponerle etiquetas al individuo, luego a la raza y así nace el racismo. La falta de educación sigue siendo la base para creer o no entender las etiquetas.

Con muchas etiquetas y publicidad se hace caro un producto en el mercado; con muchas etiquetas y publicidad se hacen las razas superiores y las inferiores. Que apenas haga unos años que se hizo una declaración diciendo que los Humanos teníamos Derechos, y que de vez en cuando se hagan declaraciones de que todas las razas son iguales… es como para pensar que seguiremos sufriendo las mentiras de las etiquetas en los hombres y en los pueblos, con serias consecuencias para toda la humanidad a la que todavía es hora que no le hemos podido colocar bien la etiqueta de racional… empieza por etiquetarte a ti mismo como racional.

El pilón.- Desde que el mundo es mundo han habido guerras, pero ninguna ha podido llevar la etiqueta de “buena”, ni siquiera las que se hacen en nombre de Dios y de los dioses, así las etiquetemos como “cruzadas” o “cristiadas”. Nunca ha habido una guerra ‘buena’ ni una ‘mala’ Paz.                                                   Salud y saludos……..