La Habana, Cuba y Madrid, España (CNN) — Los activistas antigubernamentales de Cuba afirman que más de 100 personas han sido detenidas o están desaparecidas en la isla tras las amplias protestas del domingo.
El Movimiento San Isidro, que aboga por una mayor expresión artística en Cuba, publicó una lista de activistas que, según dijo, habrían sido detenidos por las autoridades.
Entre los detenidos se encuentra la periodista Camila Acosta, según el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, que pidió su liberación.
El domingo, los periodistas de CNN fueron testigos de cómo se detenía a varias personas por la fuerza y eran arrojadas a la parte trasera de furgonetas en las protestas de La Habana. Los videos de la protesta mostraban a los manifestantes volcando un coche de policía y lanzando piedras a los agentes.
El gobierno de Cuba no ha informado del número de personas detenidas o heridas en los disturbios.
Se trata de las mayores protestas en la isla en décadas, donde los cubanos se quejan de la falta de alimentos y medicinas mientras el país atraviesa una grave crisis económica agravada por la pandemia del covid-19 y las sanciones de Estados Unidos.
En San Antonio de los Baños, una ciudad de unos 46.000 habitantes al oeste de La Habana, cientos de cubanos salieron a la calle el domingo, hartos tras casi una semana de cortes de electricidad durante el sofocante calor de julio.
“Todo el mundo estaba en la calle”, dijo a CNN un residente que no quiso ser nombrado. “Han pasado seis días con solo 12 horas de electricidad cada día. Eso fue una de las cosas que hizo estallar esto”.
En un discurso televisado a nivel nacional más tarde el domingo, el presidente Díaz-Canel culpó a las sanciones comerciales de Estados Unidos por los problemas económicos de la isla gobernada por los comunistas.
Díaz-Canel también instó a sus partidarios a enfrentarse físicamente a los manifestantes. “Se ha dado la orden de combatir”, dijo al final de su comparecencia, “los revolucionarios tienen que estar en la calle”.
Camila Acosta, la periodista detenida, escribe para el diario ABC de Madrid, la capital española.
ABC informó que fue detenida el lunes por la mañana en La Habana cuando salía de su casa. Más tarde, agentes de la seguridad de Cuba registraron su casa y se llevaron su computadora, dijo. Horas antes, la periodista había informado sobre las manifestaciones antigubernamentales del domingo en la capital cubana.
No es la primera vez que Acosta tiene un enfrentamiento con las autoridades de Cuba por hacer su trabajo como reportera, dijo ABC.
El diario dijo que su detención es “completamente inaceptable”. También pidió la “inmediata liberación de Acosta y la devolución de todo el material profesional sustraído de su domicilio”, así como la retirada de los cargos contra ella por supuestos delitos contra la seguridad del Estado cubano.
Un editor de ABC confirmó a CNN que Acosta es de nacionalidad cubana y que llevaba unos seis meses trabajando en el periódico.
El ministro de Asuntos Exteriores de España, Albares, pidió su inmediata liberación en un tuit, diciendo que “España defiende el derecho a las manifestaciones libres y pacíficas y pide a las autoridades de Cuba que lo respeten. Defendemos los derechos humanos”.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha advertido al gobierno de Cuba que no reprima a sus ciudadanos recién levantados. Pero el lunes, en otra larga reunión gubernamental televisada, el presidente de Cuba, Díaz-Canel, dijo que los manifestantes eran delincuentes. “Apedrearon a la policía, dañaron autos”, dijo. “Un comportamiento completamente vulgar, completamente indecente”.
Funcionarios del gobierno de Cuba dijeron el lunes que no había habido más protestas, al tiempo que promulgaron un apagón de Internet. Esto impidió que los cubanos compartieran imágenes de las manifestaciones con las que se habían impulsado las protestas en primer lugar.
Mientras tanto, las relaciones entre Estados Unidos y Cuba están en su punto más bajo en años. La administración de Trump promulgó algunas de las medidas económicas más duras contra Cuba en décadas, y hasta ahora, la administración de Biden no parece dispuesta a levantarlas.
La economía de Cuba, que ya está en dificultades, se ha visto muy afectada, ya que el turismo y las importaciones de bienes han caído fuertemente durante la pandemia. El domingo, las autoridades sanitarias de Cuba también informaron de un aumento récord en un solo día de nuevos casos y muertes por covid-19.
El lunes, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se unió a las autoridades cubanas para pedir a Estados Unidos que suspenda el embargo comercial a Cuba como gesto humanitario. “Ningún país del mundo debe estar cercado, bloqueado, eso es lo contrario de los derechos humanos”, dijo.
Cuando se le preguntó por qué Biden no había revertido aún las políticas de Trump hacia Cuba, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo el lunes que Estados Unidos había continuado proporcionando asistencia humanitaria y suministros médicos, pero añadió: “No tengo nada que adelantarle en términos de un cambio de política”.
Y el secretario de Estado de EE.UU., Tony Blinken, ha contraatacado a las críticas del gobierno de Cuba, diciendo que “sería un grave error que el régimen cubano interpretara lo que está sucediendo en docenas de pueblos y ciudades a lo largo de la isla como el resultado o el producto de algo que ha hecho Estados Unidos”.
“Eso es lo que estamos escuchando y viendo en Cuba, y eso es un reflejo del pueblo cubano, no de Estados Unidos ni de ningún otro actor externo”, dijo Blinken.
— Patrick Oppmann reportó desde La Habana, Al Goodman reportó desde Madrid. Tara John de CNN escribió desde Londres.
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