Este es uno de esos Casos y Cosas que no se puede definir si es una historia de amor o una verdadera tragedia.
Tal es el caso del matrimonio Hendrickson, de New York, en donde Norman, de 94 años, iba camino al funeral de su amada esposa, sentado en la limusina que lo trasladaba junto a su hijo, cuando repentinamente el anciano bajó su mirada y murmurando dijo: “Gwen, hemos tenido una larga vida juntos. Te amo. Te echaré de menos. Ven por mí”… y murió!
Para sorpresa de la familia y los invitados, quienes lo vieron como un gesto de amor, después de 66 años de matrimonio la pareja fue enterrada junta, ya que fueron inútiles los intentos de revivir al anciano tras el paro respiratorio.
El hijo de la pareja aseguró que a pesar del dolor que siente por la pérdida de sus padres, asegura que le parecía lógico que esto sucediera, después del amor que ambos se profesaban.
Comparte
Siguenos en Redes Sociales
El Aviso Magazine El Aviso Magazine El Aviso Magazine