Fuente: Telemundo
Órdenes de evacuación para más de 50,000 personas, medio centenar de estructuras convertidas en cenizas, 10,000 edificios amenazados por las llamas, devastación y cientos de escuelas cerradas son las consecuencias de los 9 focos de incendios forestales que han convertido a California en un infierno de norte a sur.
Los fuertes vientos que se registran en el estado combinados con el terreno seco y las altas temperaturas alimentan tanto las llamas como los temores de los residentes, quienes aún tienen en su memoria el recuerdo de los devastadores incendios forestales de los últimos dos años.
Estos peligrosos fuegos, que no están contenidos ni en un 20 por ciento según las autoridades, se han desatado en momentos en los que distintas plantas eléctricas realizan apagones preventivos ante la posibilidad de que fallos o desperfectos de las líneas eléctricas puedan dar origen a nuevos incendios con gran potencial devastador debido a las condiciones meteorológicas desfavorables. Estos cortes de electricidad, que se repiten dos semanas después de una primera ronda de apagones masivos programados, tienen en la oscuridad a entre 300,000 y 400,000 clientes en diferentes puntos del estado.
Un incendio que empezó este jueves por la tarde cerca de Agua Dulce, en el norte del condado de Los Ángeles, ha destruido ya varias estructuras según los bomberos. Por la noche ya se había extendido a casi 4,000 acres avivado por los fuertes vientos de Santa Ana que este viernes siguen soplando en esa región y cuyo cambio de sentido constante dificultan incluso más las labores de extinción.
Las autoridades informaron que también otros incendios se estaban extendiendo en el condado de Los Ángeles donde más de 250 escuelas suspendieron este viernes sus clases como medida de precaución. Aún no ha sido posible hacer un balance preciso de los daños registrados. “Se quemaron varias casas”, dijo la supervisora del condado, Kathryn Barger. “Tenemos constancia de al menos seis, pero el número podría crecer”, agregó.
Los bomberos alertan de la peligrosidad y del poder destructor de las llamas, que pueden llegar a consumir una vivienda en cuestión de minutos, como pudo atestiguar el reportero de Noticias Telemundo Paco Cuevas.
En el área se desplegaron casi 600 bomberos, mientras que los vientos soplaban a 20 millas por hora con ráfagas de hasta 40 mph.
Pero Los Ángeles y sus inmediaciones no es la única zona de California golpeada por esta oleada de incendios. La comunidad de Geyserville, ubicada en el condado de Sonoma, en el norte del estado, es una de las más afectadas. Muy cerca de los géiseres está el campo geotérmico más grande de todo el mundo, en donde al menos dos docenas de plantas de energía extraen vapor de cientos de pozos de montañas para generar electricidad.
El fuego en esta zona estalló en la noche del miércoles en las colinas secas, y ha arrasado con casas, negocios, viñedos y bosques. La conflagración consumió en pocas horas más de 16.000 acres debido a las poderosas llamas, avivadas por las ráfagas de los vientos vientos Diablo de hasta 70mph.
Las autoridades ordenaron la evacuación de unos 2.000 residentes, y calcularon que al menos 49 casas u otros edificios resultaron dañados. Hasta el momento no se ha informado víctimas mortales o heridos. Los esfuerzos de unos 1.300 bomberos para limitar la rápida extensión de las llamas habían logrado un grado de contención del 5% el jueves por la tarde.
Henry Bosworth, de 81 años, estaba entre los que tuvieron que huir. En horas tempranas de este miércoles encontró en la entrada de su casa varios camiones de bomberos que trataban de controlar las llamas. Cuando él y su esposa se marcharon del lugar, el fuego rodeó su granjero.
“Pude ver venir el fuego, así que salimos de allí”, dijo.
Otro incendio que afecta el sur del estado estalló en la madrugada de este jueves en el norte de San Bernardino, y ha forzado a la evacuación de cerca de 200 viviendas en el área, reportó el Servicio Forestal Nacional.
Apagones
La empresa Pacific Gas & Electric Co. (PG&E), la más grande de California, empezó este miércoles un apagón preventivo que afectó a 179.000 clientes en 17 condados. A partir del jueves, las condiciones meteorológicas mejoraron, y la luz volvió en la mayoría de estas casas y negocios, hasta llegar a abastecer un 84% de los afectados, según informó la compañía por la tarde.
PG&E dijo que pocos minutos antes de que estallara el incendio que arrasó el condado de Sonoma, una torre eléctrica presentó señales de mal funcionamiento. Aunque en el área la empresa realizó cortes, esa línea en concreto seguía transmitiendo electricidad. La motivación es que las condiciones meteorológicas pronosticadas no eran tales como para aplicar el protocolo de apagón preventivo, informó la compañía.
También Edison, empresa que opera en particular en el sur de California, ejecutó algunos apagones que interesaron a más de 31.000 clientes.
Las condiciones peligrosas continuarán durante este fin de semana y aumentarán las posibilidades de más incendios y cortes generalizados de energía. Pacific Gas & Electric Co aseguró que podrían extenderse. Edison, por su parte, calcula que podrían llegar a afectar a 386,000 clientes. Los apagones de hace dos semanas llegaron a afectar a dos millones de personas.
Comparte
Siguenos en Redes Sociales
El Aviso Magazine El Aviso Magazine El Aviso Magazine