La columna del Licenciado Vidriera Ed 4- 2015

Por Mario Soto Centeno

  Por más que siempre he admirado y casi reverenciado a esa gente precisa, concisa, sucinta y sobria que encierra muchas ideas en tres líneas, y por más que yo intento hacer lo mismo siempre necesito muchas líneas para encerrar una idea y aún así, a veces, cuando logro cerrar el corral, me doy cuenta que la idea se me ha escapado y termino siempre, con muchas líneas y sin ninguna idea.. Eso me critican mis lectores muy a menudo, pero yo sospecho que les gustan la líneas sin ideas, porque las ideas son como las pulgas, pican molestan, no se puede menos que ponerles atención.. de manera que nada más agradable y sencillo que líneas sin ideas, es por eso que a todos nos gustan esos libros, esos artículos fáciles de leer, que piensan como nosotros y no traen ideas o verdades comprometedoras, y por lo mismo le sacateamos a esos escritores que piden atención, que hacen reflexionar,… esos cansan.

   Por eso yo comprendo a mis lectores, esa forma de estar constantemente criticando mi falta de ideas y mi uso de un lenguaje que no entienden es una forma de decirme: “así sígale, así nos gusta, no diga nada de sustancia” Digo, si no, por qué me siguen leyendo… Pero de vez en cuando hay que tomar las cosas en serio, ¡deberíamos de tomar las cosas en serio! ¡Debería darnos vergüenza a mí de escribir y a ti de leer y no hacer nada más de sustancia para mejorar el mundo!. Porque este mundo ahí donde lo ves, puede mejorar mucho,  ha empeorado tanto que es más fácil mejorar que empeorar. Hemos caído tan bajo que ya nos toca subir. Pero para cambiar se necesita hacer cambios y ni en las esferas de arriba, ni en los picos de abajo ni en los cuadros de en medio hay la determinación de cambiar. Unos por conveniencia, otros por temor y otros por pura pereza rechazamos el cambio, rechazamos el mejorar… y seguimos por donde vamos, aunque veamos que vamos derechito al matadero…

 Debemos de entender por principio de cuentas que este mundo está minado con las injusticias y crímenes del pasado. Hemos propiciado, admitido y aceptado muchas injusticias, por agachones o por conveniencia, o por cobardes, al grado que sobre injusticias se han sentado estados modernos y serias instituciones que quieren pasar y pasan para los ignorantes de la historia por muy respetables, y nos sentimos orgullosos de nuestro moderno y avanzado mundo de hoy, sin querer admitir que primero tenemos que limpiar nuestro mundo. Muchos son los que cierran los ojos al pasado, pensando que con no verlo se convertirá en bueno, otros lo quieren cambiar y cambian los textos de historia y no les enseñan la verdad a las nuevas generaciones, como si con eso el pasado se convirtiera en bueno. Pero no, señor, es preciso conocer bien y aceptar el pasado como pasado; no negarlo, no inventarlo, sino entenderlo, y pedir perdón y perdonar, pero no de palabras solamente, sino con verdadero cambio de actitudes para poder empezar un mundo nuevo no de venganzas, no de más injusticias, sino de convivencia de humanos.

 Cierto, los autores de muchas injusticias ya están muertos y estarán pagando en algún lugar, si es que se paga, pero los efectos de las injusticias siguen y los seguimos tolerando los que quedamos. Y los que se siguen beneficiando de los frutos de las injusticias pasadas se hacen de la vista gorda y de la cartera gorda también… y con una palmada en el hombro quieren contentar a las víctimas de injusticias del pasado y falta de compensación e igualdad en el presente.    

  Hay que entrarle a los campos de la historia sabiendo que a veces se remueven yerbas y flores que despiden agradables aromas, pero otras veces se remueven mierdas que despiden pestilencia; hay que tener el estómago para remover suciedades y convertirlas en abono de flores olorosas. duyunoujuaraimin?

  Alguien sugiere que nos hace falta un ataque de extraterrestres, a ver si así logramos unirnos como raza humana… No sean exagerativos, no se necesita tanto. El enemigo de la raza humana hemos sido y seguimos siendo nosotros mismos y contra nosotros mismos debemos de unirnos para vencer la soberbia, la arrogancia de razas y demás frutos dañinos de la ignorancia.

   Eso sí, primero debemos de limpiar nuestro mundo de las minas de la injusticia, si queremos construir un mundo seguro… Debemos limpiar nuestro mundo de odios añejos. Reparar con justicia las injusticias y los daños hasta donde sea posible, perdonar y pedir perdón con hechos, las palabras sobran, están desprestigiadas, muy desprestigiadas…. No nos equivoquemos una vez más, nuestro mundo moderno “cibernético” no nos va a llevar a la “gloria”, como no nos llevó la revolución industrial que tantos daños ha ocasionado al mundo y a la humanidad… Si queremos un mundo mejor hay que sentarlo en cimientos sólidos, no en un campo minado…..Si queremos cambiar… hay que hacer cambios….   Salud y saludos