LA NECESIDAD DE ODIAR

Hay gente que parece que necesita odiar para ser feliz. ¿Serán de verdad felices?  Gente que parece que goza despreciando, rebajando a los demás, insultando y, si se puede, esclavizando a los demás… matado a los demás… Gente que sólo necesita a los demás para injuriarlos y pisotearlos.

Genocidios ha habido más de los que cuenta la historia moderna, algunos se han olvidado y algunos se callaron… y lo que es peor, genocidios se siguen preparando con armas cada vez más potentes. Hace ya algunos años que se calculaba que había suficientes bombas para matar siete veces a cada ser humano en el mundo. Se necesita odiar mucho a la humanidad para prepararle un futuro tan espantoso.

La manzana podrida del odio pudre a buena parte de la humanidad. Nos odiamos de raza a raza, de país a país, de familia a familia…. Nomás ‘porqué sí’, nos odiamos, nomás por el placer de odiar, porque no hemos experimentado el placer de amar, porque, lo he dicho en varias ocasiones, tenemos la falsa idea de que el amar es signo de debilidad y el odio es de fuertes. Influye la forma en que presentamos el amor. A los buenos siempre lo presentamos pasivos, débiles, con las manos juntas y los ojos en blanco o mirando las alturas y a veces ni el suelo tocan. Mientras que a los malos siempre los representamos fuertes, activos, con los pies bien plantados en la tierra. Ve nomás, por ejemplo la forma en que se representan a los ángeles y a los demonios. Nomás a un ángel, el arcángel Miguel, se le presenta espada en mano derrotando a un demonio que tiene bajo sus pies, pero a todos los demás ángeles siempre se les presenta como muy… agelicales, por decir algo.

Lo que quiero decir con todo esto es que tenemos tergiversados los valores. A lo malo llamamos bueno y viceversa al revés volteado. Al recto se le golpea y al chueco no se le molesta. Ya hemos visto que el odio no funciona para hacer un mundo feliz. Debemos presentar el amor como fuerza, como fuente de felicidad, como verdadero fruto de la razón. Debemos cambiar nuestras prioridades, entender qué es el amor y qué es el odio…..digo, si de verdad nos interesa ser felices, si no ahí sigan y ya verán…  bola de ciegos.

Salud y saludos