¿PUEDE SOBREVIVIR UN MATRIMONIO SIN INTIMIDAD?

La intimidad es un componente vital de cualquier relación romántica, incluido el matrimonio. Es el vínculo que conecta a dos personas física y emocionalmente, y juega un papel importante en el mantenimiento de una relación sana y satisfactoria. Sin embargo, cuando la intimidad está ausente en un matrimonio, puede causar tensión y angustia considerables.

La intimidad no se trata solo de sexo, sino también de cercanía emocional, confianza y vulnerabilidad. Es una parte vital de un matrimonio y juega un papel importante en el mantenimiento de una relación sana y satisfactoria. Cuando las parejas íntimas comparten una conexión profunda que fortalece su vínculo y construye su confianza, se sienten seguros en la relación, sabiendo que tienen el amor y el apoyo del otro.

Cuando la intimidad está ausente en un matrimonio, puede causar tensión y angustia significativas. La falta de conexión física y emocional puede conducir a la soledad, la frustración y el resentimiento. También puede causar una ruptura en la comunicación y conducir a una falta de confianza y comprensión entre los socios. En algunos casos, la falta de intimidad puede significar problemas más profundos en la relación, como conflictos no resueltos o necesidades no satisfechas.

SI FALTA INTIMIDAD EN UN MATRIMONIO, EXISTEN VARIAS OPCIONES PARA ABORDAR EL PROBLEMA.

Las parejas pueden buscar ayuda profesional, como asesoramiento o terapia, para resolver cualquier problema subyacente que cause la falta de intimidad. También pueden tratar de mejorar la comunicación y generar confianza compartiendo sus sentimientos y necesidades. Finalmente, pueden mejorar su conexión física y emocional participando en actividades que promuevan la intimidad, como citas nocturnas, contacto físico y gestos románticos.

La decisión de poner fin a un matrimonio es personal y no existe una respuesta única para todos. Sin embargo, supongamos que la intimidad está ausente en el matrimonio y todos los esfuerzos para abordar el problema han fallado. En ese caso, puede significar que la relación ya no es satisfactoria para ambos socios. En algunos casos, la falta de intimidad puede indicar que la pareja se ha distanciado o que sus necesidades y valores ya no están alineados.   En tales situaciones, terminar el matrimonio puede ser la mejor opción para que ambos encuentren la felicidad y la realización.

Es importante señalar que la decisión de poner fin a un matrimonio no debe tomarse a la ligera. Es un cambio de vida significativo que puede tener consecuencias de gran alcance para las parejas y los hijos. Por lo tanto, las parejas deben considerar cuidadosamente todas las opciones y buscar ayuda profesional si es necesario antes de tomar una decisión.

“Si una pareja tiene relaciones una vez al mes y ambas partes están felices con eso, pues no creo que se consideren una pareja sin intimidad o un matrimonio en crisis”, explica la doctora Denise A. Donnelly, profesora asociada de sociología, de Georgia State University, en una entrevista para el portal Well. Donnelly ha dedicado parte de su carrera a estudiar las dinámicas dentro de las parejas casadas.

Al ser consultada sobre si las parejas casadas que no tienen sexo son menos felices que aquellas que tienen una vida sexual más activa, la especialista dice que depende de lo que cada pareja considere ‘normal’. No se puede hablar de un número de veces por semana, ya que cada individuo es distinto.

El problema aparece cuando hay una falta de sintonía en la intimidad. Si una de las partes considera que deberían tener más relaciones y su pareja tiene ideas diferentes sobre este tema, entonces hay desconexión y pueden aparecer los conflictos. “Si una persona siente cierto rechazo, eso puede afectar a su seguridad, a su autoestima”, explica la psicóloga de pareja Isabel Viteri.

Otro problema es que para muchos matrimonios es difícil hablar de estos temas. Prefieren quedarse callados y no hablar de lo que sienten, necesitan y piensan.

Terminar un matrimonio no es la única solución a la falta de intimidad. Hay opciones alternativas que las parejas pueden explorar, como un matrimonio abierto o una separación de prueba. En un matrimonio abierto, los socios acuerdan tener relaciones sexuales fuera de su matrimonio mientras mantienen su conexión emocional.

La intimidad es un componente vital de cualquier matrimonio; su ausencia puede causar tensión y angustia significativas. Sin embargo, la decisión de poner fin a un matrimonio no debe tomarse a la ligera, y las parejas deben considerar cuidadosamente todas las opciones antes de decidir. Buscar ayuda profesional y explorar opciones alternativas, como un matrimonio abierto o una separación de prueba, puede ayudar a abordar la falta de intimidad. En última instancia, el objetivo debe ser encontrar una solución que promueva la felicidad y la realización de ambos miembros de la relación.