¿QUIÉN SE VA Y QUIÉN SE QUEDA?

Es demasiado temprano como para predecir cuál de los candidatos será el elegido de los demócratas en las elecciones presidenciales de noviembre.  Sin embargo, a medida que entramos a estados más diversos –con menos afluencia de euro-estadounidenses— las dudas empezarán a despejarse y los candidatos más débiles abandonarán la campaña uno por uno.

Bernie Sanders y Pete Buttigieg se lucieron en las elecciones de Iowa y New Hampshire.  De estos dos candidatos, el que está más cerca de la recta final es indudablemente Bernie Sanders.

El senador de Vermont representa al ala más progresista de los demócratas, especialmente de las nuevas generaciones de votantes en las zonas urbanas, de los trabajadores que generan un salario mínimo y personas profesionales que han sido ignorados por una economía que beneficia a los sectores más pudientes del país.

Se espera que Sanders tenga una buena acogida con los votantes de Nevada, lo mismo que en el Sur de Carolina.  En este sentido, el voto del ala más izquierdista del partido demócrata parece haber decidió darle la mano a Sanders y restarle su apoyo a Elizabeth Warren, quien, hasta el momento, no ha podido levantar el vuelo.

Mientras tanto, Buttigieg tiene una tarea más difícil con las candidaturas del expresidente Joe Biden y la senadora Amy Klobuchar, quienes son más experimentados que él y quienes tienen un proyecto político similar.  Es decir, los tres representan al centrismo del Partido Demócrata.

A pesar de que Biden no pudo adjudicarse una victoria en las dos primeras elecciones, es muy probable que su momento empiece a tomar curso en el Sur de Carolina.  Existe una población nutrida de Afroamericanos en este estado, que ya mostraron favoritismo hacia su candidatura desde el inicio mismo de su lanzamiento hacia la Casa Blanca.

El hecho de que tomó parte del equipo del presidente Barack Obama, como compañero de fórmula en las elecciones de 2008 y 2012, le ha proporcionado el respaldo de una gran parte de la población afroamericana en el Sur de Carolina.

Las elecciones primarias en este estado es el momento existencial para Biden. Si le va bien, entonces proseguirá con sus objetivos trazados.  Si le va mal, entonces estará sellando su despedida de la contienda electoral.

Así, Sanders parece ser el único que tiene un lugar seguro en la recta final de los demócratas.  De los tres moderados, Buttigieg tiene una pequeña ventaja sobre los otros dos.  Es joven, carismático y tiene una propuesta que aglutinaría a centristas y progresistas.  Empero, tiene que ganarse el corazón de la población afroamericana y latina para continuar con su racha ganadora.

Humberto Caspa, Ph.D., es profesor e investigador de Economics On The Move. E-mail: hcletters@yahoo.com