Se Debe Perder Para Ganar

Querida Doctora Consejos: Con la firme seguridad de su profesionalismo me dirijo a usted para que me ayude a resolver el siguiente problema:

Salir avante de problemas no es sencillo, en especialsi no se cuenta con ayuda. Por eso la “Doctora Consejos”, es una sección que espera ser una guía para quienes no encuentran la salida. El caso de hoy es:

Querida Doctora Consejos: Con la firme seguridad de su profesionalismo me dirijo a usted para que me ayude a resolver el siguiente problema:

Todo comenzó cuando tenía 2 años de casada. Mi esposo tuvo una relación extramarital que tuvo como fruto, una hija. Debido a esto, mi marido y yo nos separamos, pero después de un tiempo decidimos darnos una segunda oportunidad y volvimos a juntarnos. Al principio todo iba bien, pero hace 4 años, descubrí que él y la mujer con la había procreado a su hija, no habían terminado nunca. Mi relación se ha deteriorado mucho por esa razón. Y es que yo soy una persona que tiende mucho a reprochar, esto ocasionó que el año pasado, mi esposo se fuera de la casa. Pero tres meses después, volvimos. Pero actualmente, mi frustración es que él aún sigue buscándola ya que ella le da dinero, y le presta su carro. Además, ella me ha dicho que nunca lo va a dejar. Yo quiero mucho a mi marido, pero todo este asunto me está haciendo sufrir como no tiene idea. Otro problema que no me ha permitido alejarme de él definitivamente, es mi dependencia sexual hacia él y de igual manera la él hacia mí.

El niega seguir teniendo una relación con esta mujer, pero yo lo dudo pues se llaman a diario, según él, en plan de amigos. Han pasado muchas cosas feas en mi relación, y creo que en gran parte, yo soy la culpable. Necesito saber cómo perdonar para poder conseguir mi paz mental y espiritual. Aconséjeme, por favor. — Mariela

Querida Mariela:

Hay dos asuntos aquí muy importantes si quieres recuperar tu paz mental y espiritual. El primero sería parar la guerra. Dejar los reproches del lado y soltar, dentro de tu corazón, el resentimiento y los celos. El segundo asunto sería decidir si quieres romper o continuar con tu esposo. Tu relación, como tú misma dices, está sumamente dañada. Si esa relación tiene una oportunidad, solamente vas a poder saberlo una vez dejes de querer controlar el resultado. Si en tu corazón aceptas la posibilidad de ser feliz con él y sin él, vas a ver que ocurren cosas maravillosas. Es algo mágico. Si te pasas la vida tratando de cambiar a una persona, te darás cuenta que esa persona no cambia jamás (es una lucha de perder donde no hay ganadores. Es tu fuerza contra su fuerza). Pero si te concentras en cambiarte a tí misma (dejar de pelear, aprender a tener vida propia, más allá de los problemas de pareja), te darás cuenta que siendo tú el eje de todo lo que ocurre en tu vida, al cambiar tú, las cosas a tu derredor empiezan a moverse en una dinámica de cambio. El secreto es aceptar el resultado final sea cual sea, sin tratar de ganar la partida. No olvides que a veces perdiendo se gana.