SEXTO SENTIDO

Quiuuubo, quiuubo!, quiuubo! cómo están mis cuatachos machos y mis morri’as boni’as, bien?… ¡ah, po’s qué güeno!

 Y antes que se me olvide y empiece a escribir _indejadas, déjame mando un juerte, juerte abrazo de pulpo y un enorme beso cachetón, a cada una de mis leitoras, por ser este martes 8, el Día Internacional de la Mujer…  mmmuuuak!!!

 Y ‘ora sí, pa’ entrar en calor, qué les parece si a todos y por parejo, les echo un rapidín, ¡sí!, claro, me refiero a un chistorete cortito y rápidito…Y sin más preámbulo allí les va:

 Resulta que don Elvio Lao, funerario de profesión, se queda trabajando una noche hasta muy tarde. Su trabajo era examinar el cuerpo de los muertos antes de ser enviados a enterrar o cremar. Cuando examinaba el cuerpo del Sr. Farías, que estaba por ser cremado, hizo un asombroso descubrimiento: Aquel hombre tenía un enorme  miembro… el más largo que había visto!

 -¡Ay, en la moder!… con razón muchas en el pueblo andaban rete-alborotadas por este bato -pensó-… Pues lo siento mucho Sr. Farías, -dice el funerario al muerto-, pero no puedo enviarlo a cremar con ese tremendo miembro. Este tiene que ser guardado para la posteridad.

  Dicho esto utiliza sus herramientas y separando el pene del cuerpo, lo puso en su portafolios y se fue a casa. A la primera persona que se lo muestra fue a su esposa.

   Tengo algo que mostrarte que no vas a creer, le dijo, y acto seguido abre el maletín y….

¡Ay Dios mío! -grita ella sorprendida. – ¡Ay no la _-iingues… ¡¿A poco se murió Farías!?…

      Je!, je!, je!… ella por referencias sabía eso, ehhh!

 Pero cambiando de tema, fíjensennn que ahora que celebraremos el día de la mujer, mi memoria se remontó a cuando iba a la escuela (uuuuh)… güeno pero sí jui (aunque casi nunca entraba, pero sí iba), en fin, pero una de las pocas cosas que recuerdo me enseñaron en aquellos años, es que tenemos cinco sentidos. El sentido de la vista, del oído, olfato, gusto y el del tacto, que es el más bonito porque gracias a él andamos “tactando” aquí, allá y acullá.

  Pero con el tiempo y la ‘viejez’ (vejez,pues) fui aprendiendo que aparte de esos, también existen otras cosas o situaciones a las que llamamos sentidos, como por ejemplo tenemos el sentido del deber, el sentido común (que es el menos común de los sentidos), el sentido del humor, el sentido contrario, el doble sentido, el sentido de rotación, las palabras con doble sentido y los escritos sin sentido, sí!, má -o- meno como éste.

  Como verán, existen muchas clases de sentidos y todos ellos tienen sus razón de ser, sin embargo, hay uno diferente, excepcional, incomprensible, algunos lo llaman intuición, otros presentimiento, percepción, clarividencia o la mayoría dice que es ‘‘sexto sentido”.

  A esa cosa los psicolócos bautizaron como un sentido extrasensorial y ocupa el Sexto Lugar en el conteo de los sentidos. A este sentir también se le puede definir como intuición o presentimiento y es una cualidad o gracia innata e inexplicable de las mujeres, aunque hay que reconocer que algunos hombres también tienen este sentido, pero son los menos.

 Y si le pensamos un tantito, nos daremos cuenta que por lo general este sentimiento es preventivo, es decir, sienten cuando “algo” malo le va o le puede pasar a un ser querido o también puede ser que alguno de esos seres queridos esté triste.

    El asunto es que, los batos que estudian la mente y el comportamiento psíquico del ser humano, dicen que el Sexto Sentido gira en varias direcciones, lo mismo en la familia, en el trabajo, los negocios o en la vida diaria, pero que lo desarrollan con mayor claridad y frecuencia las mujeres debido a que ya nacen con él.

   Hablar sobre esto del sexto sentido es muy largo y algo complicado, y no quiero enrollarlos más con este rollo, pero déjenme decirles que después de leer y leer, yo llegué a la conclusión de que a estos changos llamados psicólogos o psicoanalistas, aunque sean rete __ingones, pero les faltó analizar  tres cosas muy, muy importantes:

 Una, que la mujer no tiene un sexto sentido, sino que tiene “Dos Sextos Sentidos”… ahh! sí!, uno de ellos como mamá. Porque como madre presiente o intuye peligros, tristezas, enfermedades, accidentes, etc., y el otro es como novia, esposa o pareja, porque aparte de eso mismo, las condenadas también presienten cuando uno anda por ahí de canijillo o de volado con una largotona, (aunque les diré que muchas veces esas son sólo afiguraciones de las viejas, ¿a poco no?).

 Pero la tercera cosa que los loqueros (psicólogos) no dicen, es que si bien nosotros los varones no desarrollamos mucho el sexto sentido, pero si desarrollamos y muy bien por cierto, otro sentido, que es igual o incluso más importante; ¿saben cuál?… Pues claro…! El hermoso, el insustituible, el inigualable ¡¡Sexo Sentido!!….