El Horno de Microondas

Los hornos de microondas han facilitado el estilo de vida actual de las personas, ya que ahorra tiempo considerable en este mundo lleno de actividades y compromisos.

Por su pasión al chocolate, ingenioso hombre creo este aparato que es "indispensable" en cualquier hogar

Los hornos de microondas han facilitado el estilo de vida actual de las personas, ya que ahorra tiempo considerable en este mundo lleno de actividades y compromisos.
 ¿Pero sabía usted que la invención del microondas se debe indirectamente a la pasión que el ingeniero físico Percy Spencer sentía por el chocolate?

 La historia nos dice que corría el año 1946, cuando Spencer que trabajaba para la compañía Raytheon Corporation, estaba comprobando un generador de ondas electromagnéticas de muy alta frecuencia. El ingeniero llevaba en un bolsillo de su bata una cho-colatina; cuando fue a darle un tiento, el chocolate estaba derretido.

 Al no encontrar explicación aparente, Spencer plan-teó un experimento: colocó granos de maíz cerca del generador y empezaron a explotar como cuando hacemos palomitas. Un año después, Percy Spencer perfeccionaba e intentaba rentabilizar aquellos hor-nos experimentales.
 Pero de hecho, el primer horno de microondas propiamente dicho, no se comercializó sino hasta un año después, de aquellos experimentos.

 Los primeros hornos microondas que salieron al mercado a penas guardan parecido con los que usa-mos hoy: medían dos metros de alto y pesaban 250 kg. El primer microondas lo compró un restaurante de Boston, y el horno de tamaño familiar se puso a la venta en 1967 y en sólo diez años la venta de micro-ondas superaba a la de los hornos de gas.

 Las ondas electromagnéticas se conocen desde que Hertz las descubriera en 1887. Sin embargo las microondas u ondas electromagnéticas se conocen desde comienzos de siglo pasado, pero hasta 1946, su principal aplicación era para utilizarse en el radar.

  En resumen podemos decir que aunque este aparato electrodomestico nos es muy útil, pero no debemos olvidar que como cualquier otro aparato eléctrico, el uso que le demos debe ser el indicado y que no es recomendable improvisar y usar el horno para otros fines para los que está destinado.