Estos son los mejores y peores trabajos ahora que Estados Unidos está en recesión económica por el coronavirus

Si ha perdido su trabajo o quiere cambiarlo por la crisis, estos son los empleos que más pagan, los que más personas van a necesitar, los que van a crecer incluso en estos tiempos duros y los que tienen menos futuro.

La economía estadounidense alcanzó su pico de actividad en febrero y desde entonces ha caído en recesión, acabando con una época de crecimiento de 128 meses (desde junio de 2009), la más larga de la historia registrada. La crisis originada por la pandemia de coronavirus ha dejado hasta mayo 21 millones de desempleados, que podrían ser muchos más, según el Departamento de Trabajo.

[Es oficial: la economía está en recesión (aunque podría ser breve)]

En esta situación es difícil predecir cuáles serán los mejores trabajos y las industrias más resistentes a la crisis a corto plazo, pero el Departamento de Trabajo actualizó en abril sus previsiones a medio y largo plazo, que igual le pueden ayudar si desea cambiar de empleo o la crisis le obliga a ello.

Para el periodo que va de 2018 a 2028, las 10 industrias de mayor crecimiento previsto son instaladores de paneles solares (con un auge previsto del 63% y un salario medio de 42,680 dólares al año), técnicos de turbinas de viento (57%; 54,370 dólares), asistentes de salud en el hogar (37%; 24,200 dólares), asistentes de cuidados personales (36%; 24,020 dólares), asistentes de terapia ocupacional (33%, 60,220 dólares), analistas de seguridad informática (32%; 98,350 dólares), asistentes médicos (31%; 108,610 dólares), estadísticos (31%, 87,780 dólares), enfermeros (28%; 107,030 dólares) y patólogos del lenguaje( (27%; 77,510 dólares).

Los mayores salarios, según datos de 2018, los reciben psiquiatras, anestesiólogos, ginecólogos, cirujanos y ortodoncistas ((208,000 dólares al año), seguidos de otras profesiones médicas y de arquitectos e ingenieros (140,760 dólares), pilotos de avión (140,340 dólares) o gestores de mercadotecnia (134,290 dólares).

Todas estas cifras, sin embargo, son previas al comienzo de la recesión. Entonces, la previsión de mayor crecimiento futuro en número de empleos favorecía a los asistentes de cuidados personales, los trabajadores que preparan o sirven comida, los enfermeros, los asistentes de salud en el hogar, los cocineros, los ingenieros informáticos, los meseros, los limpiadores y los trabajadores de la construcción.

Al ser un cálculo hasta 2028, es posible que siga siendo acertado. En cualquier caso, el Departamento de Trabajo sí actualizó en abril sus previsiones respecto a qué profesiones crecerán más que la media y a cuáles les irá peor.

Entre las que crecerán mucho más rápido están los profesionales que calculan el riesgo en los seguros, los entrenadores de animales, los profesores universitarios de negocios o biología, los albañiles especializados en cemento, los cocineros, los técnicos de laboratorio, los trabajadores de salud comunitaria, los empleados de la construcción, los asistentes dentales y los nutricionistas, entre otros.

Las profesiones que declinarán en el futuro son, entre otras, los comerciales de publicidad, los recolectores de deudas, los educadores de adultos, los contables, los capitanes de barco, los instaladores de moqueta y alfombras, los cajeros, los programadores informáticos, los cocineros de comida chatarra, los oficiales de correccionales, los operadores de maquinaria de perforación, los instaladores y reparadores de equipos electrónicos en autos, los editores, los secretarios ejecutivos, los granjeros, los diseñadores de flores, los conserjes de hotel, los especialistas en relaciones laborales, los modelos, los empleados de oficina en general, los carteros y otros empleados del servicio postal, los vendedores de tienda, los marineros, los secretarios, los agentes de viajes, los ayudantes de farmacia o los controladores de estacionamiento.