ola amiga, una semana más compartiendo con ustedes algunas de las cartas y correos electrónicos que me han llegado, gracias por su confianza y palabras tan bonitas, en esta oportunidad quiero compartir con ustedes un tema muy cotidiano, el de la timidez, que seguramente más de una la sufre o la sufrió en ciertas situaciones.
Ahora sí, vayan por su cafecito o té, para que nos tomemos un pequeño descanso de las tareas cotidianas que nos esperan en casa y en el trabajo y tengamos nuestra charla entre amigas, que, te confieso, espero toda la semana para tenerla.
Comencemos…
La timidez es una emoción social y una característica de la personalidad, que, como aseguran los especialistas, tiene un efecto en cómo te sientes, piensas y te comportas frente al mundo. Este sentimiento puede hacerte sentir incómoda, cohibida, asustada, nerviosa o insegura. Automáticamente esto en tu interior se convierte en una auto represión, o una auto protección, pero esto a la gente le puede resultar algo agresivo, así como considerarte como una mujer maleducada.
La gente puede notar que te ruborices, tiembles, y hasta te quedes callada, pero no siempre se pueden dar cuenta de tu timidez, y eso puede ser un caos. Nunca podemos quedar como mal-educadas frente a nadie, eso no es de una dama.
La timidez te puede llegar en cualquier momento, como el primer día de trabajo, cuando estás en un lugar con gente que no conoces, o hasta cuando tienes una conversación con alguien que te gusta.
Seguramente muchas veces te has preguntado qué es lo que provoca tu timidez, y la respuesta es muy sencilla, así es tu personalidad, como también hay factores que influyen como lo son las experiencias por las que has pasado.
Por otro lado tienes que analizar si realmente es timidez o fobia social, que son dos cosas muy diferentes. Que ésta última se trata de la timidez llevada al extremo y suele ir acompañada de ansiedad, en este caso te provoca evitar hacer ciertas cosas como también te convierte en una persona solitaria.
Nadie está predestinado a ser o no tímido, pero si sientes que este sentimiento te detiene, tienes que tomar acción, estoy segura de que puedes superarlo, sustituyendo las malas experiencias por otras nuevas y positivas que te permitan desarrollar otras destrezas. La clave consiste en rodearte de personas que te quieren sinceramente. Los amigos y los familiares te ayudarán a crear nuevas experiencias y estarán conscientes de que no deberán sobreprotegerte, para que de esta forma puedas aprender a afrontar por ti misma determinadas experiencias.
Ahora bien, de ahora en adelante compórtate como una mujer que no es tímida, ese truco te ayudará a adoptar una actitud más confiada y te permitirá ensayar otras conductas sociales. Un buen tip sería que pienses en alguien que admiras por su don de mujer extrovertida, y actúa como si fueras ella. Ojo, esto hazlo sin perder tu personalidad, solo es un ensayo para que puedas perder el miedo a relacionarte con otras personas.
Por otro lado, concéntrate en tus puntos fuertes, cuando estés en una situación en que te sientas incómoda, piensa en ellos. Si crees por ejemplo que eres competente en el asunto del que se está hablando, eso aumentará automáticamente tu autoestima y tu confianza en ti misma.
Estoy segura que tú puedes lograrlo, solo tienes que creértelo.
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