Piense y Sonría

  Dramas Conyugales

– Pero mujer… ¿por qué lloras?
— Porque no me haces caso cuando hablo!.
– Pero cómo no!.. por supuesto que estoy interesado en tu plática!…. Si echo la cabeza hacia atrás, cierro los ojos y empiezo a roncar, es sólo pa’concentrarme en lo que dices… y na’más!

 <><><><><><><><><><>

Cuestión de fonética

 Suena un teléfono del café de chinos en el muelle y contesta Coo-Lon, su robusto propietario.
— ¿Estoy hablando al malecón?, pregunta una voz. •• ¡Malecón tu abuelo!,-se enfurece el chino- ¡Estás hablando con Coo-Lon, que sel más homble que tú… cablón?”.

   <><><><><><><><><><>
  Error caaasi sin importancia…

Se dice que después de que el lobo capturó a Caperucita Roja, y al notar que éste, en lugar de feroz, se ponía meloso, le preguntó:
–Oye!, ¿Significa eso que me vas a comer?.
•• Je,,, je,,, No, Caperucita!, no te voy a comer…. _ _ sabes???…  el cuento está equivocado en una letra!
               ….. no le entendí  – jiii!, jiii!.

   <><><><><><><><><><>

   Buena justificación

 Un empleado de oficina llegó, otra vez, tarde a la oficina; su patrón lo reprende con severidad.
— Es que me quedé dormido, jefe, trata de justificarse el flojo.
•• ¿Qué no tiene despertador?”, le pregunta muy molesto el jefe.
— Claro que sí patrón…  pero po’s siempre suena cuando estoy dormido.

    <><><><><><><><><><>

  Presagio… o futurista?

A pesar de su elocuente propaganda, un vendedor de seguros de vida no lograba convencer a un matrimonio de comprar una póliza.
–En realidad, no quiero presionarlos -dijo, levantándose para marcharse-; consúltenlo con la almohada…  ahora que si de casualidad despiertan mañana, comuníquenme su decisión.