Soy la persona menos indicada para hablar de alguien que posterga las cosas, debido a mis ocasionales fallas en esa área. Dejaré que los expertos en autoayuda brinden técnicas para modificar esa conducta. No obstante, lo que debo decir es que postergar las cosas puede ser un hábito muy costoso.
A continuación describo de qué manera la postergación de lo inevitable puede acarrear consecuencias financieras:
Recargos molestos. No cumplir con el pago de multas por los libros tomados de la biblioteca o por infracciones de estacionamiento puede superar las multas originales y acumular intereses. Muchos gobiernos locales que tratan de equilibrar sus presupuestos son cada vez más estrictos con la recaudación de dichos recargos – y en ocasiones los derivan a las agencias de cobranza.
Multas por impuestos. Todos saben que el impuesto sobre la renta vence el 15 de abril (o en el caso de este año, el 18 de abril). Si no presenta su declaración de impuestos o solicitud de extensión antes de esa fecha, la multa sobre los impuestos adeudados aumentará significativamente. Tendrá que pagar un 5 por ciento adicional de impuestos adeudados por cada mes total o parcial atrasado, más intereses, hasta una multa máxima del 25 por ciento.
Sin embargo, si presenta su declaración o si al menos solicita una extensión a tiempo, la multa bajará a 0.5 por ciento por mes, más intereses. Por lo tanto, incluso si no llega a tiempo para calcular sus impuestos antes del plazo límite, por lo menos solicite una extensión.
Plazos de préstamos para estudiantes. Quienes deseen solicitar préstamos federales para estudiantes primeramente deben completar una Solicitud Gratuita de Asistencia Estudiantil Federal (FAFSA, por sus siglas en inglés), disponible en www.fafsa.ed.gov. Este proceso, que lleva tiempo, implica reunir una gran cantidad de información financiera, por lo tanto, es entendible que muchas personas lo posterguen. Pero, si no cumple con el plazo para la presentación, podría perder el derecho a miles de dólares en asistencia.
Además, mucha gente se da cuenta demasiado tarde de que, si bien el plazo para la solicitud federal es el 30 de junio, las fechas límite para asistencia en muchos estados y en universidades individuales por lo general son mucho antes. En verdad es conveniente comenzar a averiguar en otoño acerca del próximo año.
Participación 401(k). A pesar de que saben que sus ahorros de jubilación no son adecuados, muchas personas postergan los pagos a la cuenta IRA o al plan 401(k) del empleador. Algunas excusas son: No puedo pagarlo, las opciones de inversión son muy complicadas, etc. Pero lo cierto es que cuanto antes comience a ahorrar, más rápidamente crecerá su cuenta.
Si su empleador realiza aportes patronales (generalmente 50 por ciento o más del primer 3 por ciento del monto que usted ahorra) debería al menos contribuir con lo suficiente como para igualar ese aporte. ¿Dónde más obtendrá un rendimiento del 50 por ciento sobre su inversión?
A continuación, otras maneras en que postergar las cosas podría afectar a su billetera:
• No cumplir con los plazos de registro del vehículo o de control de emisiones, por lo cual podría ser multado.
• No realizar el mantenimiento preventivo de su automóvil podría implicar costosas reparaciones más tarde.
• Lo mismo ocurre con su cuerpo: realícese chequeos dentales y de salud para evitar condiciones médicas serias o prevéngalas con tiempo.
• Siempre informe a los emisores de facturas su nuevo domicilio a la brevedad. No cumplir con los pagos puede producir recargos por demora e incluso mayores tasas de interés.
Si alguna de estas situaciones le resulta familiar, intente solucionarla, al menos de a una a la vez. Quién sabe, quizás le resulte conveniente.
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