Santa Claus

Muchos son los nombres que recibe este personaje, que según la tradición cuenta, cada Nochebuena recorre muchos países y lugares repartiendo regalos a los niños: Santa Claus, San Nicolás, Father Christmas, Papá Noel, Baboo Natale, etc…

Pero el personaje de carne y hueso que de alguna manera se asemeja al Santa Claus, vivió en el siglo IV en los valles de Lycia en el Asia Menor. Se llamaba Nicolás, fue obispo de Myra y una de las figuras más veneradas por los cristianos de Oriente y Occidente durante toda la Edad Media.

Parece ser que Nicolás de Bari nació en el seno de una familia de comerciantes italianos, quienes le procuraron una sólida educación moral e intelectual. Tal vez por eso, cuando sus padres murieron por culpa de la peste, conmovido por el desastre, Niccola repartió parte de su cuantiosa herencia entre la muchedumbre asustada que había sobrevivido a la catástrofe. Luego se puso en camino hacia Myra (Turquía), para buscar a su tío que era el obispo del lugar y con el que vivió durante algún tiempo.

Según cuenta la leyenda, tras la muerte de su tío, los sacerdotes de la zona, al no ponerse de acuerdo sobre quién sería su sucesor, decidieron elegir al primer cristiano que pusiera los pies en la iglesia. Y fue así que se convirtió en obispo de Myra. A partir de ahí, el obispo Nicolás todos los años, durante los primeros días de diciembre regalaba ropa y comida a los más menesterosos.

Pero siglos más tarde surgió otro personaje, Christkind (el niño Jesús), que repartiría regalos y juguetes en el día de Navidad. El avance de la tradición de los regalos del niño Jesús, forzó a que la tradición de San Nicolás pasara a entregar sus regalos el día 25. La adorable misión de repartir regalos a los niños en Navidad fue adoptada por toda Europa.
De ahí en más, su figura creció a tal punto que se convirtió en santo patrón de Grecia, Rusia y en toda Europa se alzaron templos en su nombre.

La tradición de San Nicolás llevando los regalos en la Nochebuena se expandió por Europa durante el siglo XII, mezclándose con otras celebraciones. Quinientos años más tarde, los holandeses llevan esta tradición a Estados Unidos.

Hasta que el escritor Clement Moore lo imaginó en un trineo tirado por ocho renos, Papá Noel repartía sus regalos a pie, o montado en un caballo. Pero la imagen y el aspecto que hoy conocemos de Santa Claus fue dibujado por primera vez en 1931 por la compañía Coca-Cola por Habdon Sundblom. La vestimenta mantuvo los colores rojo y blanco, que son los de la compañía, pero su traje se hizo más lujoso y atractivo.
Con esta historia de Santa queremos mantener la ilusión de nuestros niños.