Tal Vez…

   La vida está llena de sorpresas, algunas buenas, otras no tanto; pero el que sea buena y agradable, depende mucho del modo en que la veamos y los pensamientos que tengamos hacia ella.   

   A continuación compartiremos un lindo pensamiento cuya autoría fue del magnate griego Aristóteles Onassis y que, de entenderse adecuadamente, puede ayudar mucho a cambiar nuestra perspectiva respecto a la vida y a enfrentar con entusiasmo los retos que diariamente tenemos que afrontar. Este se titula: Tal vez…

Tal vez voy a envejecer muy rápido. Pero lucharé para que el día haya valido la pena.

Tal vez sufra innumerables desilusiones en el transcurso de mi vida, pero haré que ellas pierdan la importancia delante de los gestos de amor que encuentre.

Tal vez no tenga la fuerza para realizar todas mis ideas, pero jamás me consideraré un derrotado.

Tal vez en algún instante sufra una terrible caída, pero no me quedaré mucho tiempo mirando hacia el suelo.

Tal vez un día yo sufra alguna injusticia, pero jamás asumiré el papel de víctima.

Tal vez tenga que enfrentarme con algunos enemigos, pero tendré la humildad para aceptar las manos que se extendieron hacia mí.

Tal vez en una de esas noches frías yo derrame muchas lágrimas, pero jamás me avergonzaré por demostrar ese gesto.

Tal vez sea engañado muchas veces, pero no dejaré de creer que en algún lugar existe alguien que merece mi confianza.

Tal vez con el tiempo yo reconozca que cometí muchos errores, pero no desistiré de seguir recorriendo mi camino.

Tal vez con el transcurrir de los años pierda  amigos, pero aprenderé que aquellos que son  verdaderos amigos jamás estarán perdidos.

Tal vez algunas personas quieran mi mal, pero yo continuaré plantando las semillas de fraternidad por donde yo pase.

Tal vez  nunca aprenda todas las lecciones necesarias, pero tendré en cuenta que las verdaderas enseñanzas ya están grabadas en mi interior.

Tal vez me deprima por no saber la letra de aquella canción, pero estaré feliz con las otras capacidades que aún poseo.

Tal vez no tenga motivos para grandes conmemoraciones, pero no dejaré de alegrarme por las grandes conquistas.

Tal vez la voluntad de abandonar todo se torne mi compañera, pero en vez de huir, correré detrás de lo que deseo.

Tal vez yo no sea exactamente quien me gustaría ser, pero me admiraré de quien soy, porque al final sabré que asimismo con incontables dudas, Soy capaz de construir una vida mejor. 

   Y si todavía no me convencí de esto, es porque creo que “todavía no llegó el fin”. Porque al final no habrá ningún “tal vez” y sí la certeza de que mi vida valió la pena y yo hice lo mejor que podía”.

–Aristóteles Onassis