TÉ PARA LA ANSIEDAD

Nos ha escrito una lectora pidiendo un buen té para la ansiedad. Dice que luego no puede dormir porque se queda pensando en los problemas. Le vamos a ofrecer no uno sino varios remedios que incluirán, claro, un gran té. La ansiedad y la angustia solemos confundirlas. Para que quede claro: la ansiedad es ganas de que algo pase. La angustia es temor de que algo pase. Ambas nos pueden hacer mucho daño, pero nos causan emociones distintas.

La ansiedad se relaciona mucho con la necesidad de controlar o lo que es nuevo. Es muy normal sentir ansiedad en esas circunstancias. Lo que no es normal es tener ansiedad todo el tiempo, como nos describe nuestra lectora.

En esa circunstancia debe usted revisar qué le causa a ansiedad. Si no es capaz de soltar usted el futuro, entonces puede que sea adicta a la ansiedad misma. Eso le hace sentir despierta, eficiente, pero le cansa mucho. Las personas procastinadoras sólo se activan cuando sienten ansiedad.

Buenamente hay muchas cosas que se pueden hacer para reducir la ansiedad. La primera es revise su dieta, si es alta en azúcares, sales y grasas, ahí tiene un problema. Lo segundo es evitar el tabaco y el alcohol. El primero causa ansiedad por sí mismo. El segundo puede dar ansiedad en las resacas.

El ejercicio físico por al menos 20 minutos al día puede cambiarle la vida. Se trata de activar el corazón por más de veinte minutos o de caminar por unos 40 minutos si ya su edad no le permite correr.

Entre las hierbas hay muchas que hacen té relajante. Le voy a comentar de varias:

La valeriana es uno de los calmantes más conocidos. Es el sedante de la naturaleza, así que ayuda mucho a dormir. Con un puñado de yerbas frescas y agua caliente puede preparar una infusión.

El té de flor de azahar es también bueno para los nervios. Así le venderán las hojas del limón y el naranjo. Pero hay un té especial que le recomiendo mucho, que es el de 7 azahares. En realidad lleva pasiflora, tila, toronjil, zapote blanco, limón, cidra y azahar. Lo venden ya preparado en las botánicas. Le reto a que tome dos tazas una noche y verá lo bien que duerme.

Por último, la ansiedad existe en su cabeza. Sus propias ideas le pueden calmar o inquietar. Es usted quien al final del día decide, con su actitud, si le pasa una cosa u otra.

Antes de poner en práctica este o cualquier otro remedio casero, consulte a su médico.