fbpx
LOADING

Type to search

El Cerillo

Share
Comparte

Tal vez uno de los más grandes inventos de los últimos dos siglos y al que se le ha dado poca importancia, es el cerillo, también conocido en algunos lugares como fósforo. Este es una varillita que en

Tal vez uno de los más grandes inventos de los últimos dos siglos y al que se le ha dado poca importancia, es el cerillo, también conocido en algunos lugares como fósforo. Este es una varillita que en uno de sus extremos tiene una cabeza con una mezcla química hecha a base de fósforo, que ocasiona combustión, por eso si se frota su cabeza con una superficie rugosa o algo parecida a una lija, enciende.  Generalmente los hay de dos tipos: Integral y de Seguridad. Integral es aquel que enciende por fricción en cualquier sitio; el de seguridad sólo enciende en su rascador. También se pueden clasificar por el tipo de material que esté construido el vástago, ya sea madera, papel o papel con cera.

EL CERILLO… A TRAVES DEL TIEMPO

Uno de los primeros cerillos inventados fue el de azufre, se hacían sumergiendo franjas delgadas de madera en azufre fundido; el que ardía al aplicarle una chispa producida por una piedra y acero. En 1812 fue inventado el cerillo químico que se fabricaba con una cubierta de azufre y provista de una mezcla de fósforo, clorato de potasio y azúcar, éste ardía al entrar en contacto con ácido sulfúrico. En 1827, el químico británico Jonh Walker introdujo en Inglaterra los primeros fósforos de fricción. En 1844, el sueco Pasch inventó los fósforos de seguridad, que salieron al mercado alrededor de 1850. Son los que se usan en la actualidad.

SU PRODUCCION Y FUNCION

En los cerillos de fricción fabricados actualmente, se sumerge un extremo de la barra en un agente incombustible para que no arda fácilmente, y el otro extremo se recubre con parafina. La cabeza del fósforo contiene: un agente oxidante, una sustancia que se oxida fácilmente, como azufre o resina de trementina; un relleno de arcilla; un material adhesivo, como la cola, y un colorante para darle un color. Al final de la punta hay una mínima cantidad de trisulfuro de fósforo, el cual se descompone y arde a baja temperatura; éste prende la parafina, que arde más fácilmente por la presencia de los demás productos. Los fósforos de seguridad están diseñados de forma que la cabeza sólo arde al rasparla contra la superficie de fricción que posee la caja. La punta de los fósforos de seguridad contiene trisulfuro de antimonio y un agente oxidante pegados con caseína o cola y son realizados de madera. La superficie de frotamiento de la caja contiene vidrio en polvo para la fricción, fósforo rojo y cola (adhesivo). Al raspar allí el fósforo, el calor de fricción transforma el fósforo rojo en blanco, que arde y prende a su vez la cabeza de la cerilla.

Comparte
WordPress Appliance - Powered by TurnKey Linux