Encerró a sus hijas, durante siete años!

Una madre psíquicamente enferma tenía presas y en plena oscuridad a sus tres hijas y … Enterese y Sorprendase que este encierro fue durante siete años.

Una madre psíquicamente enferma tenía presas
y en plena oscuridad a sus tres hijas y …Entérese
y Sorpréndase que este encierro fue durante siete
años!!!

En Klagenfurt, Austria, según reporta el diario
Österreich, una mujer de 39 años, aparte de tener
cautivas a sus tres hijas, las trataba como unos
animales. Esto era, aparentemente porque ella no
aguantaba estar divorciada de su marido.
Linza, la madre perturbada, se atrincheraba en
su casa, vistosa desde fuera pero descuidada por
dentro, con las niñas que en aquel entonces tenían
6, 10 y 13 años, cerraba las cortinas, sacaba todas
las bombillas eléctricas para que no se pudiera encender
la luz y les prohibía ir al colegio a Viktoria,
Katharina y Elizabeth.

Ante las autoridades, la mujer indicó que enseñaba
ella misma a sus hijas en casa, pero en realidad
las sometía a un lavado de cerebro, hasta que rechazaban
a su padre, afirmó el diario.

Cuando el padre desesperado, pidiendo en vano
una intervención del juzgado, quería verlas, ella
afirmaba que estaban enfermas o que las había llevado
a casa de la abuela.

Mientras tanto, las tres chicas se ahogaban en inmundicias
y apenas veían la luz del día, no tenían
más contactos sociales que con la madre enferma
y jugaban con los ratones que abundaban en la
casa y a los que daban apodos.

Lenguaje propio

Las niñas desarrollaban en su cárcel un idioma
propio, difícil de comprender para ajenos, según
comunicó al periódico la terapeuta que las trata
ahora, Waltraud Kubelka, que atestigua a la mayor
de ellas padecer de “invalidez psíquico-social”
incurable.

La policía no intervino hasta que los vecinos reiteradas
veces presentaban denuncias, lo que finalmente
llevó a la liberación de las jóvenes.

Desde hace unos meses, tiempo en que se dio la
liberación de las tres jovencitas, la enferma mental
se halla en prisión preventiva.
La terapeuta declaró al periódico Österreich que
la mayor de las hijas se encuentra muy mal y que
para las otras dos tendrán que pasar años hasta
que puedan superar los daños psíquicos sufridos.